Un récord para la historia y en segundo plano

La vorágine en la que está inmerso el Betis tras la derrota ante el Alavés dejó en segundo plano el nuevo ascenso de Rubén Castro en la tabla de goleadores históricos del club verdiblanco. Con su tanto ante el conjunto vitoriano, esta vez de penalti, el canario igualó a Hipólito Rincón en el segundo escalón (93), quedándose a sólo uno de Domínguez, que con 94 lidera este registro.

No fue el mejor partido del delantero bético, que apenas intervino en el juego. Un inexistente fuera de juego que le señalaron en el primer tiempo, tras una combinación con Dani Ceballos y que podría haber significado el 1-2 fue la acción más trascendente en la que participó Rubén Castro, que aun así no dudó en agarrar el balón para lanzar el penalti que supuso el gol verdiblanco.

El canario siempre ha mostrado su deseo de convertirse en el máximo goleador de la historia verdiblanca e incluso ése fue uno de los motivos que facilitaron su renovación el pasado verano. A falta de un tanto para colocarse en la cima de ese registro, la única duda es cuándo Rubén logrará ese objetivo, pese a que ahora mismo se haya quedado en un segundo plano. La delicada situación deportiva del equipo, a ocho puntos de la zona de ascenso directo, le quita importancia a ese detalle individual que el canario coloca como secundario con respecto al regreso a Primera.