El Consejo Empresarial de Turismo de CEA, presidido por Miguel Sánchez Hernández, señaló  "ante el período de ausencia total de actividad turística desde marzo y la previsión de un proceso de desescalada incierto, lento y con grandes restricciones", que es necesario "alertar al conjunto de la sociedad sobre las consecuencias catastróficas que supondría la no extensión de los ERTE por fuerza mayor, más allá del estado de alarma, pues estaría en grave riesgo la pervivencia de multitud de empresas y del empleo asociado".

La normativa vigente es muy clara respecto a que los ERTE por fuerza mayor pierden su vigencia en el mes que cese la misma, puso manifiesto la CEA a través de una nota, "por lo que miles de trabajadores deberían volver a su puesto de trabajo cuando la actividad de las empresas sería prácticamente nula, generando un desequilibrio irreparable para las mismas".

Necesidad de liquidez

El Consejo Empresarial de Turismo abordó la elaboración de un documento de propuestas al Plan de Choque de la Junta de Andalucía en materia turística.

Para dotar de liquidez al sector se demanda al Estado "el establecimiento de un IVA reducido, que impulse la actividad", así como una reestructuración de "todo el sistema impositivo local, pues se está grabando a empresarios y autónomos que no han podido desarrollar su actividad o lo van a hacer bajo unas condiciones de rentabilidad insostenibles".

Otras medidas que se van a trasladar a la Junta son: ayudas a la digitalización turística y programas de formación y recualificación; un nuevo modelo de gobernanza y formulación de la promoción turística; la creación de bonos para incentivar el gasto turístico; la flexibilización de la normativa que afecta al sector de la hostelería en materia de autorizaciones y la ampliación del espacio de terrazas.