El PSOE propondrá utilizar 30.000 millones de euros del rescate bancario del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) para facilitar créditos que reactiven la economía real y permitan a las familias con dificultades renegociar sus hipotecas, ha explicado el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba. El líder del PSOE se ha reunido con su equipo económico y con las direcciones del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso y en el Senado para estudiar el Plan para Reactivar la Economía que esta elaborando.

En su intervención, Pérez Rubalcaba ha advertido de que si no se toman estas medidas las familias no podrán hacer frente a sus hipotecas y los bancos tendrán que volver a solicitar una recapitalización. Recordó que de la línea de crédito abierta en el MEDE por un importe de 100.000 millones quedan 60.000, y la mitad podrían ser utilizados para evitar la morosidad en el sistema financiero.

El secretario general del PSOE incidió en que con el programa de medidas que seguirán debatiendo quieren dar respuesta a los principales problemas del país: falta de crédito de las empresas, el desempleo provocado por la reforma laboral, el desarrollo económico, el problema de ingresos y la pobreza. Alfredo Pérez Rubalcaba señaló que, aunque Europa ha dado dos años más a España para conseguir los objetivos de déficit, "se van a quedar muy cortos" y hay que tomar medidas con urgencia para salir de la crisis.

El PSOE propondrá "crédito a corto plazo para quienes lo necesitan" y propone destinar 20.000 para créditos a las empresas, fomento de autoempleo, emprendedores e internacionalización de las empresas. La primera medida de su programa es que los países con dificultades como España no contabilicen en su déficit público actuaciones para salir de la crisis, como las inversiones productivas, la I+D+i o el fomento de la educación.

En cuanto al empleo, dijo que se van a perder 500.000 puestos de trabajo este año y que hay que tomar medidas urgentes: "Una moratoria de despidos para los próximos tres años" en la que se contemple la medida que se aplica en Alemania para las empresas en dificultades. Se trata de que estas empresas renegocien con sus trabajadores una reducción de jornada y de sueldo y que estos sean pagados en un 50% por la empresa y el otro por el Estado, menos en el caso de los mayores de 50 años, en el que el Estado se haría cargo del 60%. Pérez Rubalcaba ha explicado que en Alemania hay un millón de puestos de trabajo en esta situación.

También ha destacado la necesidad de facilitar las nuevas contrataciones y para ello propone la bonificación extraordinaria de las cuotas de la seguridad social (que en el primer año sería del cien por cien, del 75% en el segundo y del 50% en el tercero) y la modificación de los contratos de formación y prácticas para facilitar su contratación. En política industrial pidió "un empujón" para la investigación, el desarrollo y la innovación, y facilitar a las empresas que se agrupen y crezcan para ser más competitivas y exporten.

Otro de los ejes de su plan es una profunda reforma fiscal, de forma que "paguen más quienes más tengan", dijo Pérez Rubalcaba, y para eso propone que el impuesto de la renta pase a ser un impuesto de riqueza de forma que tributen igual los beneficios patrimoniales que los de la renta, homogeneizar el impuesto de sucesiones y donaciones en todas las comunidades y la creación de una oficina integral de lucha contra el fraude, entre otras medidas.

Alfredo Pérez Rubalcaba también ha señalado la necesidad de hacer un gran pacto contra la pobreza, con un fondo con mil millones de euros para crear 30.000 empleos y beneficiar a 500.000 familias. El dirigente del PSOE ha señalado que Europa está cambiando su percepción sobre la política que hay que aplicar para salir de la crisis y que el Gobierno tiene que "olvidarse del ajuste a ultranza" y aplicar medidas para el crecimiento.