Como los Cinco Magníficos del fútbol español, René González (Chicago, 1956) forma un quinteto con sus compañeros de odisea, nombrados héroes de la República de Cuba, que se infiltraron en la mafia anticubana y fueron acusados de espionaje, juzgados y presos. Dos hijas, Irma e Ivette, y un nieto de seis años, Ignacio René, uno más de los que él tenía cuando llegó a Cuba en 1961. Ha recorrido casi toda Andalucía con su libro: Huelva, Córdoba, Sevilla (presentó en Triana Escrito desde el banquillo), Cádiz, Granada.

-Lo suyo fue de película...

-Hay dos proyectos de película. Uno con canadienses, otro con franceses.

-Es norteamericano de cuna y de presidio...

-Soy cubano, pero es cierto que nací en Chicago y estuve preso en Pensilvania.

-¿Cuándo los detienen?

-El 12 de septiembre de 1998. La FBI de Miami nos acusó de espionaje.

-¿Qué no se habrá perdido Pedro Sánchez en su visita a Cuba?

-La Habana colonial.

-¿Cuándo llegó a Cuba?

-El 2 de octubre de 1961, con cinco años, dos años después de la Revolución.

-¿Qué le llevó a escribir un libro sobre su caso?

-Escrito desde el banquillo. El diario de René decidí escribirlo cuando los fiscales empezaron a chantajearme usando a mi mujer. Me propuse escribirle una carta a Olga cada día del juicio y lo acabé en la cárcel.

-¿Como Scherezade con Harum al Raschid?

-El tiempo fue más o menos parecido a esas Mil y una noches.

-La lista de escritores cubanos es interminable. ¿Delirio o enfermedad?

-Se escribe porque se lee, en mi país no se ha perdido el hábito de la lectura.

-¿Cómo vivieron el 11-S?

-Lo vivimos esperando el juicio. Nos detienen con Clinton y nos juzgan cuando estaba Bush. Lo vivimos por televisión en Miami.

-¿Es su primera visita a España?

-El año pasado llegué a Huelva desde Portugal, pero fue una visita fugaz.

-¿Qué queda de España?

-Lo primero que queda de España somos los cubanos. La arquitectura es muy parecida. El patio, la iglesia enfrente, las viviendas alrededor.

-¿Qué les va a contar?

-Lo que ya saben de ustedes por lo que hemos leído y los andaluces que van por Cuba. Me impresiona la historia que tienen y cómo la preservan.

-¿Qué tiempo preso?

-Trece años y un mes. Fue una venganza del Gobierno americano contra Cuba, un acto de traición de Clinton contra Fidel. Los dos Gobiernos habían acordado descubrir el terrorismo que se estaba infiltrando en la Florida. El Gobierno norteamericano, en lugar de detener a los terroristas nos detuvo a nosotros que estábamos vigilándolos. Metieron bombas y explosivos en Cuba, atacaron los hoteles, la industria turística en un momento en el que Cuba intentaba recuperarse económicamente; entraron mercenarios como turistas; causaron la muerte de un turista italiano y varios heridos.

-¿El único de los cinco nacido en Estados Unidos?

-Antonio Guerrero también nació allí. Su padre y el mío se fueron a Estados Unidos a jugar pelota (béisbol). Después se quedaron de emigrantes y volvieron con la Revolución.

-Ahora que se habla tanto del Valle de los Caídos, parece que Cuba guardó tres días de luto cuando murió Franco...

-No lo recuerdo, en esa época yo estaba en Angola.

-Fraga y Fidel se llevaban muy bien...

-Fraga era bastante amigo de Cuba.

-Y Fidel Castro tenía ascendientes gallegos.

-Por ahí vendría.

-Ahora que su libro está en las librerías, ¿con qué autores cubanos se identifica más?

-Con Samuel Feijóo y el Che Guevara. Era muy testimonial y al mismo tiempo muy objetivo. Tenía mucha capacidad de análisis, era capaz de analizarse a sí mismo y para ello separarse de su persona.

-Caballero Bonald, escritor español hijo de cubano, ha dicho que están los que adoran Paradiso de Lezama Lima y los que no pueden con esa obra...

-Estoy entre los primeros.

-En El siglo de las luces, Alejo Carpentier critica una revolución que se lleva al Caribe la guillotina...

-Es muy difícil hacer una revolución sin tener que guillotinar a alguien. Lo importante es que la guillotina no sea el instrumento principal. Toda revolución genera una contrarrevolución y tiene que defenderse. Lo que importa es no corromperse en esa defensa de la revolución y no ser igual que los contrarrevolucionarios.

-¿Conoció a Fidel?

-Tuve ese privilegio.

-¿Y a Nicolás Guillén?

-No. Me gusta mucho la versión de sus canciones que hace Ana Belén.

-¿Qué proyecto de película saldrá adelante?

-Estamos más cercanos del canadiense. Stephen Kimber, autor del libro Lo que yace al otro lado del mar, contactó con nosotros cuando estábamos en la cárcel. La película francesa tiene como base la novela del brasileño Los últimos soldados de la guerra fría.

-¿Cuándo salió libre?

-En octubre de 2011. Fernando (González) salió en febrero de 2014. El 17 de diciembre de ese año, cuando Obama y Raúl Castro establecieron relaciones, salen Gerardo (Hernández), Ramón (Labañina) y Antonio (Guerrero).

-¿Cómo conoce a la destinataria de sus diarios?

-Empezamos el 10 de abril de 1982 en una playa de La Habana, Boca Ciega.