El bufete Montero Aramburu & Gómez-Villares Atencia estrena nombre y afronta un ambicioso plan de crecimiento
Abogacía
El despacho incluye los apellidos de los cuatro socios fundadores en su nueva designación y cambia también la imagen corporativa para afrontar "una nueva etapa que será decisiva para el futuro" de sus profesionales
Montero Aramburu y Gómez-Villares & Atencia sellan su fusión para crear el mayor despacho de Andalucía
El despacho de abogados Montero Aramburu & Gómez-Villares Atencia se presenta al mercado con nueva imagen corporativa tras culminar el proceso de integración de Gómez-Villares Atencia en Montero Aramburu, anunciado el pasado abril. La nueva firma operará desde este mes de octubre como Montero Aramburu & Gómez-Villares Atencia, nueva designación que incluye los apellidos de los cuatro socios fundadores para aprovechar el prestigio de ambos bufetes.
Liderada por los socios directores Javier Valdecantos y Leonardo Neri, la firma de servicios profesionales cuenta con una facturación conjunta de 28 millones de euros, una plantilla de 304 profesionales entre abogados y economistas y 370 personas en total y nueve sedes repartidas entre Andalucía, Canarias y Madrid. Se convierte así en un referente en Andalucía y en uno de los despachos nacionales más relevantes de la abogacía española por volumen de facturación, número de profesionales y clientes.
Montero Aramburu & Gómez-Villares Atencia suma y refuerza la experiencia de los profesionales de ambas firmas en las diecisiete principales áreas de práctica vinculadas al derecho de los negocios, que incluyen fiscal, mercantil, fusiones y adquisiciones, procesal, arbitraje, laboral, bancario, financiero y mercado de capitales, derecho público, regulatorio, civil y propiedad industrial e intelectual. Además, fortalece sus capacidades para atender a los clientes en algunos de los sectores de actividad más relevantes, como el inmobiliario, energía, digital, turismo, telecomunicaciones, deporte y entretenimiento, entre otros.
La nueva identidad, según ha explicado el despacho, "trata de reflejar dinamismo, espíritu de progreso y modernidad, con una propuesta de valor basada en el acompañamiento a clientes con soluciones jurídicas sólidas, innovadoras, eficaces y honestas". Los colores corporativos de ambos despachos dan paso a una nueva paleta de color (azul oscuro, azul claro, arena y naranja) que ofrece "una mezcla de confianza, profesionalidad, claridad y creatividad".
Leonardo Neri, socio codirector de la firma, asegura que este cambio de imagen corporativa "va más allá de lo visual", ya que "implica una nueva etapa que será decisiva para el futuro del despacho". "Queremos transmitir tanto interna como externamente nuestro posicionamiento estratégico basado en el conocimiento, compromiso, cercanía y honestidad, cualidades y valores con los queremos ser identificados”, finaliza su comunicado.
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