La Consejería de Justicia, Administración Local y Función Pública ha acordado con las autoridades judiciales y los sindicatos incorporar algunas de sus peticiones para la adecuación de los espacios de la futura Ciudad de la Justicia de Sevilla, entre ellas aplazar el traslado de los primeros juzgados hasta septiembre, una vez acabe el periodo de vacaciones de los profesionales, para así facilitar la mudanza en época laboral.

Esa medida atañe al primer inmueble que será ocupado, el edificio A, donde se ubicarán todos los juzgados de lo Contencioso-Administrativa (trece) y lo Mercantil (cuatro). La mudanza de estos diecisiete órganos estaba prevista en principio para después del 30 de junio, fecha planificada para la ejecución de las obras de adecuación del bloque. Ahora se hará en septiembre, ya que la mayoría del personal está de vacaciones en agosto al ser un mes inhábil para la actividad judicial.

Según ha informado este jueves la propia Consejería, este es uno de los frutos del "diálogo permanente" entre el consejero José Antonio Nieto y los distintos agentes implicados. De hecho, se constituyó un grupo de trabajo para coordinar todo el proceso después de que los jueces de Sevilla hicieran públicas sus quejas respecto a los planes de la Junta y llegaran a tildar de "inviable" el plan inicial de la Junta.

Los edificios del complejo de Palmas Altas que albergarán la Ciudad de la Justicia contarán con grandes salas de espera para el público, mientras que la zona de despachos de los jueces y letrados de la Administración de Justicia (LAJ) será de acceso restringido, según informó el consejero a la Junta de Jueces de Sevilla en una reunión para exponerles los últimos avances de las obras de adecuación del edificio A. En ese encuentro, celebrado precisamente después de las quejas de los magistrados, los jueces realizaron algunas propuestas de mejora que la Junta ha decidido incorporar "en aras de ofrecer las mejores condiciones a los operadores jurídicos y, sobre todo, la prestación del servicio al ciudadano".

La Consejería también aumentará el "confort laboral" de los funcionarios aislando las plantas altas

También como novedad se va a garantizar la doble circulación dentro del edificio para diferenciar el acceso del público en las zonas de salas de vista del de los jueces. Además, se va a "preservar el confort laboral" de los funcionarios mejorando las medidas de aislamiento en las plantas altas del edificio, donde se situará la oficina judicial. Incluso se va a dar mayor amplitud a las salas de vistas y se ha previsto un espacio por si en un futuro fuese necesario ampliar su número.

No obstante, en la reunión que mantuvo con los sindicatos, la Consejería les otorgó un mes de plazo para entregar nuevas aportaciones si así lo consideraban necesario.

Los trabajos de adecuación del edificio A cuentan con un presupuesto de 588.682,27 euros. Además de habilitar los espacios necesarios para los 17 juzgados que se mudarán este año, también quedarán ya listas las instalaciones para otros cuatro juzgados de Primera Instancia que se trasladarán a partir de 2024, una vez que se liciten y ejecuten las obras de adaptación del edificio B. Está previsto que allí se ubiquen el resto de órganos de esta jurisdicción (21).

En la planta baja, donde estarán las salas de vistas, habrá una gran sala de espera donde los ciudadanos permanecerán hasta ser llamados a juicio, lo que evitará concentraciones de públicos en los pasillos. En esta zona no habrá despachos, sólo salas para testigos disponibles para su uso en caso necesario.

Los espacios de trabajo de los funcionarios y los despachos de los jueces y LAJ se distribuirán en el resto de plantas y el acceso allí será restringido. En cada planta habrá tres salas de reuniones de gran tamaño. Además, los despachos de los magistrados contarán con anexos compartidos cada dos para reuniones más pequeñas.

Los servicios técnicos de la Consejería están trabajando en una distribución exacta de cada uno de los juzgados y para ello cuentan con los datos del número de funcionarios que trabajan en ellos. El personal de cada órgano contará con módulos de mobiliario independientes y separados entre sí pero se procurará que los integrantes del mismo órgano judicial estén cerca los unos de los otros. Asimismo, cada juzgado contará con una sala para su uso como archivo y el resto de estancias de los funcionarios también dispondrán de armarios y estantes.