Opel Corsa-e, un utilitario eléctrico con genio
Primer contacto
El Corsa-e es la versión eléctrica del más pequeño de los Opel. Tiene un motor de 136 CV, autonomía para recorrer 337 km y está a la venta con un precio de tarifa desde 31.200 euros, aunque puede ser 8.000 euros más barato con subvenciones y ofertas.
Opel acaba de poner a la venta la versión eléctrica de su Corsa, el Corsa-e, técnicamente semejante a otros modelos también del grupo PSA, como los Peugeot e-208, el más parecido en tanto que también es un utilitario -ambos miden 4,06 m de largo-; los SUV DS3 Crossback E-tense y Peugeot 2008, a los que Opel sumará el Mokka-e (ventas después del verano, entregas a principios de 2021) o, incluso, el Citroën ë-C4. Todos ellos se desarrollan partiendo de la misma plataforma, la CMP. Esta base es multienergía, de modo que puede utilizarse no sólo para construir coches eléctricos, sino que también permite utilizarse para el montaje de motores de gasolina o Diesel, dando una enorme flexibilidad a la fabricación que, instantáneamente, puede adaptarse a la demanda del mercado, reduciendo costes y permitiendo una producción eficiente.
Como todos los demás eléctricos del grupo PSA que utilizan la CMP, e incluso algunos modelos más grandes, el motor es de 136 CV y 260 Nm de par máximo, está alimentado por una batería de iones de litio con celdas suministradas por CATL y ensambladas, como el resto del coche en la factoría de Figueruelas (Zaragoza), de 50 kWh, de los que 46,3 son utilizables. Con esta energía la autonomía es de 337 km, según la norma WLTP. Esto es, a razón de un consumo medio de 17 kWh/100 km, moderadamente bajo.
De 0 a 80 por ciento, en 30 minutos
La electricidad puede reponerse llegando al 80 por ciento de la capacidad de la batería, si se usan cargadores de carga rápida de hasta 100 kW, que es la máxima potencia que admite el Opel Corsa-e, en 30 minutos. Si se recurre a los de 50 kW, los más abundantes en la red de carga, 60 minutos. En estos casos, la conexión utilizada es una CCS2 o Combo 2.
Con enchufes de 7,4 kW, que son los más potentes que suelen instalarse en domicilios, la batería podría llenarse, de iniciar la carga desde vacío, en algo más de 6 horas. Usando un wallbox con corriente trifásica y 11 kW, que es la potencia máxima que admite el cargador embarcado opcional del Opel Corsa-e, unas 4 horas. Los cables para estas recargas sí son suministrados como parte del equipamiento de serie.
Así se va el Opel Corsa-e
El Corsa-e, en esta primera toma de contacto, ha demostrado ser un coche de conducción precisa sobre buen asfalto y reacciones rápidas al acelerador, siempre que se elija el modo Sport de su Drive Mode, por delante de Normal o Eco, éste indicado para estirar al máximo la autonomía y para lo que incluso prescinde de la climatización.
Seleccionar unos u otros repercute sobre todo en la respuesta del motor, pues mientras que en Sport proporciona toda la potencia, 136 CV; en Normal sólo 109 y en Eco, 82. Mucho menos lo hace, por ejemplo, en el tacto de la dirección.
Otra posibilidad de interacción que el Opel Corsa-e guarda para su conductor es seleccionar un modo de retención alternativo al estándar mediante la palanca del cambio cuando no se está acelerando. De usar B en lugar de D obtenemos el doble de retención, por lo que puede ser interesante su utilización en las situaciones en las que recurriríamos al freno, por ejemplo, preparándonos para entrar a una curva.
De utilizarla, consecuentemente, también es mayor la regeneración de electricidad, aunque el dato de los kilovatios recuperados no está entre los que el Corsa-e aporta, como tampoco el porcentaje de batería en marcha (si tiene un gráfico con su nivel o los kilómetros de autonomía estimada), en la pantalla de la instrumentación que no llena el espacio destinado a ella.
En nuestro recorrido, con poco trazado urbano y muchos más kilómetros centrados en vías rápidas de circunvalación (100 km/h) y autopista (120 km/h), tuvo un consumo comedido: 16,2 kWh/100 km. Este dato se aporta en la pantalla central, junto a un gráfico de barras que, cada 10 minutos, indica el consumo obtenido.
En ella puede definirse, al igual que desde la aplicación myOpel, el momento en que se inicia y detiene la carga, así como la activación del acondicionamiento térmico del habitáculo que, por definición, hace funcionar a la climatización a 21ºC.
Edition y Elegance, dos niveles con 1.900 euros de diferencia
El Opel Corsa-e cuenta con dos niveles de equipamiento, Edition y Elegance, entre los que hay 1.900 euros de diferencia de precio. En la dotación de serie de ambos están el sistema de reconocimiento de señales, las alertas de mantenimiento de carril, de fatiga y de colisión frontal; más el control de velocidad de crucero o la frenada de emergencia, entre las ayudas a la conducción. También el aire acondicionado que, en opción, en ambos es reemplazable por un climatizador monozonal.
Entre las opciones comunes para Edition y Elegance están el sistema de infoentretenimiento con pantalla de 10” con Bluetooth y compatibilidad para Android Audio y Apple Car Play con navegador, que sustituye a la de 5” de los Edition y a la de 7” de los Elegance; la alerta de ángulo muerto, la cámara de visión trasera y sensores de aparcamiento delanteros y traseros, asientos de tipo GS-line, con mayor sujeción lateral que los de serie de tipo Comfort; o, como elemento inédito en el sector, los faros matriciales que permiten adaptar la iluminación a cada situación de tráfico. También se sitúan entre las opciones el volante calefactado o un segundo cable de carga con enchufe tipo Schuko. Opel lo denomina de emergencia.
Distinguen al Elegance, en tanto equipamiento de serie, además de la pantalla central más grande y compatible con Apple Car Play y Android Auto, los tipos de molduras de las ventanas, los faros LED, la radio digital o mayor número de tomas USB. También el asistente de luz de carretera o una instrumentación con pantalla de 7” en lugar de sólo 3,5”.
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