Dudamel dirigirá el Concierto de Año Nuevo como un "sueño hecho realidad"

El maestro Gustavo Dudamel verá cumplirse un sueño cuando pasado mañana eleve su batuta para dirigir el tradicional Concierto de Año Nuevo de la Filarmónica de Viena, que llegará a más de 50 millones de telespectadores de 93 países. "Es un sueño hecho realidad", expresó Dudamel ayer en Viena, durante la presentación del programa de la cita que, como todos los primeros de enero, tendrá lugar en la Sala Dorada del Musikverein de Viena.

Con sus 35 años, el venezolano se convertirá así en el director de orquesta más joven que hasta la fecha haya dirigido este concierto.

Con respecto al programa, centrado en los valses y polcas de la dinastía de músicos de los Strauss y sus contemporáneos, destacó su carácter tradicional. No obstante, el maestro venezolano prometió que hará su aporte de pasión latinoamericana como si fuera "una pizca de sal extra a una receta tradicional".

La Filarmónica, que en 2017 celebra 175 años, ofrecerá 17 piezas en su "programa oficial", a lo que se añaden tres propinas, de las cuales la primera no se revelará hasta el momento, mientras que las dos últimas son siempre iguales: El Danubio Azul y la Marcha Radetzky, de Johann Strauss hijo y padre, respectivamente.

Siete de las obras serán "estrenos", entre ellas la Marcha Nechledil de Franz Lehár; el vals Les Patineurs, de Émile Waldteufel, y la obertura a la opereta Pique Dame, de Franz von Suppé.