Fallece a los 85 años el pintor sevillano Joaquín Sáenz
Arte
El artista combinó en su pintura intimista el paisajismo con las escenas de interiores y gozó de mucha popularidad en la ciudad por su faceta de cartelista
El pintor sevillano Joaquín Sáenz falleció la pasada madrugada a los 85 años. Gran paisajista y cartelista, faceta esta última que le dio mucha popularidad en la ciudad, el artista arrastraba importantes problemas de salud, pues estaba privado casi completamente de movilidad desde hace alrededor de un año y prácticamente ciego desde hace tres lustros. Fuentes cercanas a su entorno más íntimo aseguran que la muerte se produjo de manera repentina.
Joaquín Sáenz nació en diciembre de 1931 en la céntrica calle Alemanes y desde pequeño estuvo hondamente ligado al negocio familiar de la imprensa (la popular Gráficas del Sur), con sede primero en la calle San Eloy y más tarde en Becas. Ese ámbito llegaría a ser determinante en la producción del artista, que fue un excelente litógrafo y dio forma a una magnífica obra gráfica. Pero además buena parte de los trabajos más conocidos del pintor tienen que ver también con la imprenta donde comenzó a ayudar al padre con sólo 13 años (tarea que más tarde alternaría con su formación en la Escuela de Artes y Oficios). En una serie muy celebrada, Sáenz pintó esos rincones domésticos una y otra vez, animado al principio de manera decisiva por su colega y amigo Fernando Zóbel.
Junto con esas dos facetas fundamentales, Sáenz fue también un gran paisajista. En Sevilla pintó sobre todo el río y sus alrededores. También son especialmente destacables y recurrentes sus escenas de Conil de la Frontera. Como cartelista, realizó numerosos trabajos de amplia resonancia, entre ellos el cartel de la primera edición de la Bienal de Flamenco de Sevilla, en 1980; el del tercer centenario de la imagen del Cristo de la Expiración, popularmente conocido como El Cachorro, en 1982; el de la Semana Santa de 1992, para el que recreó la talla de Juan de Mesa del Santísimo Cristo de la Buena Muerte; o en 1995 el de la temporada taurina, el segundo de los carteles modernos desde que la Real Maestranza de Caballería decidió encargar sus carteles a artistas contemporáneos.
No hay comentarios