Ese huerto, ese limonero y ese patio… 150 años después

El autor hispalense, en los últimos meses, está siendo protagonista de un más que merecido revival, mediante exposiciones, congresos y demás actividades, en donde podemos conocer más íntimamente las profundidades de la persona, semillero sobre el que crece el poeta. Dos días antes de lo que nos indica su biografía, 26 de julio de 1875, pero en el mismo lugar, el Palacio de las Dueñas, ayer se celebró un acto que contó con la presencia del escritor y Presidente de la Fundación Machado, Antonio Zoido, y en la que los asistentes pudieron presenciar las relecturas flamencas y dramáticas de la obra del poeta sevillano a cargo del cantaor Segundo Falcón, el guitarrista Antonio Franco y el actor Julio Moreno, del Grupo Atenea Teatro Laboratorio. El propio Zoido se unió este año de celebración en torno a la obra y vida de Machado, con la publicación del libro La Sevilla de los Machado (Fundación Machado), que presentó durante el acto, y que el autor resumió como “una invitación a mirar la ciudad desde los ojos de una familia que fue esencial en la construcción de la Sevilla moderna, literaria y cultural”.

La velada arrancó con las palabras de Ricardo Gascó Martínez, director Cultural del Palacio de las Dueñas, quien dio la bienvenida en nombre de la Fundación Casa de Alba, anfitriona del acto. Y contó, además, con la presencia de la concejala de Turismo y Cultura del Ayuntamiento de Sevilla, Angie Moreno Ramón, y de la consejera de Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, Patricia del Pozo, quien reafirmó “el compromiso de la Junta con la difusión del legado de los Machado”.

Sorprende de la biografía del homenajeado, Antonio Machado, el lugar de su nacimiento, el Palacio de las Dueñas, teniendo en cuenta que la suya era una familia humilde. La escritora Eva Díaz Pérez, profunda conocedora del legado de los Machado, no obstante es la coordinadora de la exposición Los Machado. Retrato de familia, que reúne los fondos documentales de los dos hermanos poetas y que supuso el arranque de este año machadiano, ya que pudimos disfrutar de esta muestra hasta el pasado mes de enero , explica este hecho: “La Casa de Alba no habitaba Dueñas en ese periodo de tiempo, por lo que decidieron alquilar algunas de las zonas a familias humildes, pero de confianza, como era el caso del inclasificable creador Antonio Machado Álvarez, más conocido como Demófilo, y padre de los hermanos poetas”.

Eva Díaz Pérez, precisamente, tomó parte en otro de los actos que se han celebrado coincidiendo con el 150 aniversario del nacimiento del poeta sevillano. En Soria, otro de los lugares machadianos por excelencia, tuvo lugar un congreso internacional, que reunió a buena parte de los más prestigiosos estudiosos y expertos en la obra del poeta. Y en la misma ciudad, se presentó un mapa de los lugares machadianos, impulsado por el Ministerio de Cultura, con ilustraciones de la artista murciana Ilu Ros y una selección de textos a cargo del poeta Mario Obrero. Durante la presentación, Eva Díaz Pérez conversó con el escritor Miguel Barrero, sobre la importancia de la geografía en la obra de Machado, donde la autora destacó la trascendencia de Sevilla para el poeta “como esa Arcadia de la infancia a la que siempre regresaba”.

A esta amalgama de actos, se suma la Fundación Unicaja con la exposición Sevilla y Antonio Machado. 150 aniversario del nacimiento del poeta(1875-2025), que muestra a través de multitud de escritos y documentos personales la intensa relación del poeta con la ciudad que lo vio nacer. Una exposición comisariada por el escritor Antonio Rodríguez Almodóvar, que se puede visitar hasta el 31 de octubre en la sede de la Fundación Unicaja, en la Avenida de la Palmera, donde su infancia en el Palacio de las Dueñas cuenta con un gran protagonismo. Un palacio que volvió a ser el del limonero, el huerto y el patio, 150 años después.