Pues la cosa no debe estar tan mal

17 de agosto 2020 - 02:30

Total, para lo que sirve qué más da que el Congreso permanezca cerrado y con sus inquilinos tumbados cara al sol de agosto. Se ve el panorama y no cabe otra que deducir que la cosa no debe estar tan mal cuando tan al pairo nos deja el mandarinato infumable que padecemos. Vacaciones pagadas y el país yéndose a pique como con prisas, con el comercio y la hostelería arruinados y sin visos de una recuperación a plazo medio aceptable. Hablábamos ayer de la tristeza que nos rodea y, sin embargo, la cosa no debe estar tan mal cuando tan despreocupados vemos a los dirigentes viviendo al dolce far niente, antes en La Mareta, ahora en Las Marismillas y eso sí, gratis total, con cargo al bolsillo ya esquilmado del pobre españolito que vino al mundo a que una de las dos Españas le helara el corazón. Ruina incalculable, pero debe ser imaginación nuestra viendo lo que vemos.

stats