En la Comunidad de Madrid se acaba de hacer una manifestación para reclamar que se atienda sin segregar y retrasar durante meses el cuidar a los enfermos de VIH, antes que desarrollen el sida, aunque se trate de inmigrantes que no tienen todos sus papeles en regla. Sería difícil encontrar medida más cruel y obviamente peligrosa para los mismos madrileños, incluso aquellos que han votado a una presidenta que, contra su mismo partido, el PP, y poniendo en peligro la salud de todos, menosprecia asimismo ahora las medidas para frenar la aún más grave epidemia del Covid que también padecemos.