El Ayuntamiento quiere poner en marcha un plan de transporte urbano, cuyo reto es que ningún vecino tenga que andar más de 500 metros desde su vivienda a una parada de autobús, según consta en escrito de la Delegación de Transportes que dirige José Román, que va a convocar un concurso para buscar las mejores soluciones. Se prevé además una rebaja en el precio del billete, de los 90 céntimos actuales hasta 55, mientras que el bonobús reducirá de seis a 4,50 euros. Los pensionistas pagarán 2,50 por el bono.

Entre los objetivos está también lograr una mejor conexión entre barriadas y núcleos de población, incluidos los sábados por la tarde y los domingos, y se quieren reforzar los enlaces con centros de salud, institutos, centros deportivos y el resto de medios de transporte público, según el escrito al que ha tenido acceso Efe.

La idea de partida es que funcionen dos líneas que penetren en el centro urbano, "favoreciendo a los comerciantes", y que haya otras dos que sirvan como lanzaderas "para acercar a los barrios más periféricos al centro" de Dos Hermanas y de Quintos, según refleja el estudio previo realizado por el Consistorio.

El nuevo mapa incluirá cinco líneas, según ha adelantado el Consistorio. La primera se extenderá desde la barriada de Cerro Blanco hasta Arco Norte pasando por el centro de la ciudad. La 2 (Arenal-Arco Norte-Vistazul-Las Torres- Cantely) tendrá un recorrido circular con una frecuencia de 50 minutos, entre "los barrios densamente poblados y periféricos con paradas previstas en los institutos y consultorios de Los Montecillos, San Hilario y Doña Mercedes".

La 3 hará el recorrido inverso a la 2, desde El Arenal, pasando por Cantely, Ciudad Blanca, Vistazul y Arco Norte. La línea 4 (Arenal-La Motilla-Las Portadas-El Rocío) reunificará las dos existentes ahora, la de La Motilla y la de Las Portadas. La frecuencia se reducirá de una hora a 45 minutos. Por último, la 5, entre la plaza del Arenal y la UPO, recorrerá Olivar de Quintos, Condequinto y llegará hasta el campus de la Olavide.