Provincia

El puente de hierro de San Juan se reabre el lunes para el transporte público

  • Las obras de restauración de la pasarela han supuesto una inversión de 4,8 millones cofinanciada con fondos de cohesión de la Unión Europea.

La Consejería de Obras Públicas y Transportes pondrá en servicio el próximo lunes el puente metálico de San Juan de Aznalfarache como plataforma reservada para los autobuses del Consorcio Metropolitano de Transportes, que en 2006 resolvió destinar esta infraestructura al transporte público y a los vehículos de alta ocupación. El puente fue cerrado al tráfico en 2007 para permitir las obras de remodelación y restauración adjudicadas a la unión temporal de empresas (UTE) formada por Azul y Napal.

La Junta informó de que gracias a la reapertura del puente, serán más de 300 autobuses los que crucen a diario el Guadalquivir por esta infraestructura, que también podrá ser utilizada por los servicios de transporte escolar, taxis, bicicletas y peatones. Las obras de restauración del puente de hierro, así como la de los viaductos de acceso al mismo, han supuesto una inversión de 4,8 millones de euros y han sido necesarias para que el puente, de marcado interés histórico y simbólico, se adapte al paso vehículos, posibilitando un itinerario alternativo de conexión del Aljarafe con la capital.

Los trabajos han consistido en la consolidación de toda la infraestructura, la reposición de barandillas, la pintura de la estructura metálica del puente y la adaptación de la calzada, dotándola de iluminación, acerado, plataforma reservada para transporte público y carril bici bidireccional segregado. Además, se ha dotado al puente de un sistema de cámaras conectadas al Centro de Gestión de Tráfico de Sevilla, que controlará la circulación. 

En una segunda fase, el sistema de control de accesos permitirá la circulación de autobuses en ambos sentidos mediante semáforos y la circulación de vehículos de alta ocupación (VAO), una vez que se desarrolle suficientemente la tecnología de control del número de ocupantes y que el carril bici tenga continuación y enlace con la red urbana en la avenida de Juan Pablo II, a través de una pasarela sobre la SE-30 cuyo proyecto está redactado.

El objetivo de esta plataforma es la mejora de los tiempos de recorrido del transporte público metropolitano, ya que esta nueva infraestructura evitará que los servicios de transporte de autobús tengan que compartir la misma vía empleada por el tráfico privado en los puentes de Juan Carlos I y Reina Sofía.

Así, el puente metálico de San Juan supondrá un ahorro significativo en los tiempos de viaje (entre cinco y diez minutos dependiendo de la franja horaria) para los 6.500 usuarios que se desplazan a diario a Sevilla desde diez municipios del Aljarafe en las ocho líneas metropolitanas que se va a ver beneficiadas con esta medida.

Tanto el puente metálico de San Juan como el puente ferroviario de Camas forman parte de las plataformas reservadas para el transporte público entre Gelves-Sevilla y Camas-Sevilla, respectivamente, previstas en el Plan de Transporte Metropolitano del Área de Sevilla.

Restauración de la estructura

Las obras han consistido en la reparación y el refuerzo de la estructura existente, eliminando el sistema de corrosión del acero tanto en su parte metálica como en la armadura existente en los elementos de hormigón, con el posterior repintado de todo el viaducto para protegerlo ante dicho fenómeno. 

Estas obras han incluido la reposición del aglomerado existente, dotando al puente de una superficie cómoda y segura de rodadura. Se han sustituido los elementos que se encontraban en mal estado, como son las barandillas, acerados y farolas. Además, se han colocado barreras de seguridad protegiendo de esta manera al tráfico de ciclistas y peatones del de vehículos, la señalización y el acabado con pintura de las vías.

La inversión está cofinanciada con fondos de cohesión de la Unión Europea, ya que cumple el objetivo de "contribuir a la reducción de las diferencias de desarrollo y nivel de vida entre las distintas regiones y a la reducción del retraso de las regiones menos favorecidas".

Un puente con historia

La construcción del puente de San Juan de Aznalfarache formaba parte del Plan de Mejoras del Puerto de Sevilla, redactado por José Delgado Brackenbury en 1927. Tras realizar la nueva corta del río Guadalquivir a través de la Vega de Triana, el puente era necesario para restituir el tráfico terrestre entre Sevilla y los pueblos de la margen derecha del río, sin impedir el tráfico marítimo. Para ello, se proyectó un puente con un tramo basculante que facilitaba el paso de las embarcaciones.

La obra tenía dos partes: dos viaductos de hormigón que salvaban la zona inundable y un tramo metálico sobre el cauce del río. Las obras se iniciaron el 2 de diciembre de 1929, finalizaron en marzo de 1933 y se puso en servicio a principios de 1934 para el tráfico rodado. 

En abril de 1935 se dio paso al tranvía. Con la utilización hoy día del puente como plataforma reservada para el transporte público se recupera su sentido original, que fue dotar de una vía de comunicación con la capital a los pueblos situados en la margen izquierda del Guadalquivir, mediante un transporte colectivo que, en la actualidad, es la red de líneas de autobuses que conectan a diario el Aljarafe con la capital.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios