Crimen de La Rinconada

La fiscal afirma que el crimen de La Jarilla siguió un "plan preconcebido"

  • La defensa anuncia que el acusado prestará declaración en el juicio tras negarse en tres ocasiones durante la fase de instrucción.

La Fiscalía de Sevilla mantuvo este lunes que hay pruebas indirectas para condenar a Francisco Gutiérrez Carrasco, un vecino de La Rinconada que está acusado del asesinato de su hermano Manuel, a quien supuestamente mató en junio de 2013 de tres disparos por problemas económicos dentro de un "plan preconcebido". 

En el alegato previo ante el jurado popular que debe enjuiciar este caso, la fiscal María José Rosiñol recordó que el acusado, que hasta ahora no ha prestado declaración sobre estos hechos -a pesar de haber comparecido en tres ocasiones-, tiene "derecho a mentir" y señaló que aunque no hay un testigo directo que presenciara el crimen, sí hay pruebas indirectas o indicios para condenarlo. La fiscal considera que el móvil del crimen son los problemas económicos y señaló que los testigos, incluso hay uno declarado testigo protegido en esta causa, podrán declarar sobre las "envidias, rencillas y deudas económicas" que había entre ambos hermanos. 

Por su parte, la abogada María José González, que ejerce la acusación particular en representación de la viuda y de los tres hijos del fallecido, explicó que la familia lo único que quiere es "que se haga Justicia, nada más y nada menos", y asegura que los familiares son los primeros que lamentan que el acusado sea el hermano del fallecido. La letrada aseguró que la muerte de Manuel Gutiérrez Carrasco fue un asesinato, en el que el procesado "quería, quiso y al final acabó con la vida de su hermano, se aseguró de la muerte y preparó un plan preconcebido" para llevar a cabo el crimen. La acusación insistió en que aunque no hay un testigo directo, "también hablan las cámaras de seguridad de la gasolinera, los restos de pólvora en sus pertenencias, y los testigos que evidencian las relaciones tan pésimas entre ambos hermanos". 

Por último, el abogado de la defensa, Nicomedes Rodríguez, insistió precisamente en todo lo contrario, al afirmar que "no hay prueba directa que evidencie quién mató a Manuel", por lo que ratificó su escrito de defensa en el que solicita la libre absolución del acusado y anunció que el procesado contestará este martes a "todas las preguntas" de la fiscal. El defensor subrayó que en esta investigación se abrió en su día una línea de investigación que "indicaba que no era" Francisco el presunto autor del crimen. 

La Fiscalía recuerda en su escrito de acusación que si bien el arma homicida no ha sido localizada, Francisco poseía una pistola detonadora del calibre ocho milímetros Knoll, de la que carecía de licencia y que estaba transformada para disparar munición cargada con proyectiles del calibre 6.35 Browning. 

Esta arma es la misma que se había utilizado tan sólo unos meses en el intento de asesinato de Jaime Melgarejo, que recibió un tiro en la cabeza a las siete de la madrugada del Jueves Santo de 2012, cuando estaba dentro de su coche, detenido en un semáforo de la calle Virgen de Setefilla de Los Remedios. 

La Guardia Civil esclareció el presunto fratricidio, mientras que un juzgado de Sevilla continúa investigando, bajo secreto de sumario, el intento de asesinato del aristócrata, una causa que fue en principio archivada.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios