Un policía nacional fuera de servicio detiene a un falso agente tras un robo en Coria
El ladrón utilizaba una placa emblema de la Policía Local, que había sustraído el día anterior
Atacó al empleado de un quiosco, al que hizo un corte en el antebrazo
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Un policía nacional fuera de servicio detuvo el pasado día 17 de agosto en Coria del río a un hombre por un intento de robo. El sospechoso se identificó como funcionario público mediante una placa emblema de policía local que había sustraído el día anterior. Haciendo uso de ella, quiso robar en un quiosco del municipio, al que le fracturó el cristal. Agredió posteriormente al dependiente y a un agente.
El ladrón acudió a un quiosco ubicado en la plaza Pablo Casals del municipio, con el objetivo de robar en el mismo, para lo que ocultó parcialmente su rostro con un pañuelo, unas gafas de sol y una gorra. Una vez en el quiosco, le pidió al dependiente una serie de productos mostrándole al mismo una placa emblema de policía local, a la vez que le solicitaba que le abriese la puerta del establecimiento.
Ante la sospecha del trabajador de que el sujeto no era policía, debido a la actitud de nerviosismo que mostraba, decidió no abrir. Esto provocó que el falso policía se pusiera más nervioso y se comportara de forma muy violenta. Llegó a fracturar la ventana del quiosco, momento en el que el trabajador, aterrado, le abrió la puerta. Fue agredido en ese momento por el presunto autor, que le provocó durante el forcejeo un corte en el antebrazo, que tuvo que ser suturado.
Los hechos fueron observados atentamente por un policía nacional destinado en la comisaría local de Alcalá de Guadaíra, que se encontraba fuera de servicio y que al percatarse de lo ocurrido no dudó en intervenir identificándose como agente de policía. Esto provocó que el violento agresor huyera a la carrera del lugar, siendo seguido por el funcionario. Éste no cesó en solicitarle que se detuviera, a lo que hizo caso omiso. Finalmente, el policía le dio alcance.
En ese momento, el presunto autor del robo acometió contra el agente, golpeándolo e intentando zafarse. De poco le sirvió, pues el policía redujo al sujeto empleando la fuerza mínima indispensable para evitar seguir siendo agredido y le informó, in situ, de los motivos de su detención.
El agresor pasó posteriormente a disposición de la autoridad judicial como presunto autor de un robo con violencia, un delito de atentado y otro de usurpación de funciones. La Policía intervino una gorra, unos guantes y la placa con carnet profesional de la Policía Local, que había robado el día antes.
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