Cuando, a lo largo del verano de 2015, se fueron aprobando en los ayuntamientos las asignaciones que tendrían los nuevos alcaldes, ya se publicó que el regidor de Sevilla, Juan Espadas, no es el que más cobra de la provincia. Tiene un sueldo bruto de 60.920 euros al año, cuando por el tamaño de la ciudad podría llegar a los 100.000, el equivalente a un secretario de Estado. A Espadas le supera el primer edil de Dos Hermanas, con más de 63.800 euros y que aún así está por debajo de lo previsto para un ayuntamiento de más de 100.000 vecinos.

Espadas está también entre los alcaldes de capitales andaluzas que menos cobran, sólo por delante del de Granada, que percibe poco más de 59.270, y casi a la par que el de Cádiz, si bien éste no aparece en la relación del Ministerio porque su salario es de la Diputación de Cádiz: 4.352 euros brutos, en 14 pagas. El alcalde de Almería tiene una asignación de su ayuntamiento de 82.402,20 euros anuales; el de Jaén, 72.723,96; 63.428,25 el de Málaga; el de Córdoba, 62.253,04 y el de Huelva 61.103 euros.

Si se analizan otras capitales de un tamaño similar al de Sevilla -en el entorno de 700.000 habitantes-, Espadas también queda por debajo. El alcalde de Valencia, por ejemplo, tiene una asignación de 82.602,94 euros y el de Zaragoza de 75.749,94. El de Bilbao percibe de su consistorio más de 90.000 euros brutos al año. La alcaldesa de Madrid percibió 101.000,04 euros en 2016. Los datos de la de Barcelona no constan en la web del Ministerio de Hacienda y Función Pública.