El Betis alargó su mala racha en LaLiga en casa, donde acumula ya cinco partidos sin ganar en LaLiga tras perder ante el Celta por 3-4 en un partido de ida y vuelta. Se adelantó el cuadro gallego pero Juanmi y Canales le dieron la vuelta al marcador, pero antes del descanso Gabri Veiga puso el 2-2, justo después de que Miranda fallara un mano a mano.
En la segunda parte el partido fue una locura. Gabri Veiga repitió y Aidoo, tras un mal despeje de Borja Iglesias, hizo el 2-4. El conjunto de Pellegrini se fue a por la portería rival y Fekir redujo distancias desde el punto de penalti.
El partido se calentó al final. Luiz Felipe trató de quitarle el balón a Iago Aspas con un manotazo en la mano y el delantero se echó la mano a la cara simulando una agresión. Del Cerro Grande cayó en la mentira y el VAR no fue capaz de corregir la tremenda injusticia. Aun así, tuvo la última el Betis para empatar, pero Édgar, en una posición franca, no acertó a cabecear bien.
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