Tras cerrarse el pasado viernes la cesión de Tosca al PAOK griego, el club verdiblanco continúa buscándole una salida a los jugadores que no entran en los planes de Quique Setién para el primer equipo.

El siguiente en abandonar la disciplina heliopolitana debe ser Julio Gracia, cuyo préstamo al Cartagena, de Segunda B, se encuentra muy avanzado. El joven canterano es muy del gusto de Setién, pero los técnicos de la casa han decidido que lo mejor para su progresión será una cesión para que continúe madurando y el Cartagena ha apostado fuerte por su contratación.

El hecho de que Julio Gracia tenga familia en tierras murcianas sería un punto a favor para que el canterano verdiblanco ponga rumbo a Cartagena, aunque también ha tenido otras propuestas incluso de superior categoría.

También deben cerrarse en estos días las salidas de Álex Alegría y Narváez. La intención del Betis es que ambos pueda encontrar un destino en Primera –al delantero lo pretendía el Rayo, entre otros–, lo que supondría que el club verdiblanco no tuviera que pagar nada de la ficha de ambos, una cuestión distinta a la de recalar en Segunda, donde numerosos equipos tienen problemas con el límite salarial impuesto por la Liga.