Anoeta mide a Quique Setién

Sevilla/Con 27 puntos todavía en juego y los puestos europeos más baratos de los últimos años, el Betis mantiene intactas sus opciones de repetir una clasificación continental, aunque la imagen que viene mostrando en las últimas semanas parece indicar lo contrario. Decantar de qué lado caerá la temporada se decidirá en las próximas jornadas, pero la cita ante la Real Sociedad en Anoeta adquiere una mayor trascendencia para Quique Setién, que necesita una reacción en ese equipo que sólo viene ofreciendo dudas desde las caídas en las eliminatorias.

El desgaste físico acumulado en 2019, en el que acumuló partidos entre semana durante enero y febrero, la pérdida de relevancia de esa segunda unidad que podría ofrecer oxígeno en este momento y el mal momento de jugadores principales están provocando que el Betis de Setién enseñe los peores vicios de ese estilo de juego que el cántabro ha impuesto en su equipo desde hace año y medio.

Con la irregularidad mostrada durante esta temporada, en la que al Betis le ha costado cuajar partidos redondos pese a los elogios exacerbados de los aduladores del entrenador, los verdiblancos están afrontando el tramo decisivo de la temporada en el peor momento del año. Lejos está quedando ese Betis que recuperaba la pelota en el campo rival, su principal virtud defensiva, y también aquel conjunto que, a pesar de la constante falta de verticalidad de todo el año, dominaba el tempo de los partidos desde la posesión.

Una victoria, la conseguida en la recta final del partido ante el Celta, acumulan los verdiblancos desde que el Valencia los despertó del sueño de la Copa del Rey, y a la que se contraponen las derrotas ante Getafe y Barcelona y el punto de fortuna obtenido el pasado domingo en Vallecas, donde el Rayo, que llevaba siete derrotas seguidas, le destapó todas las carencias.

Necesita Setién hallar una fórmula que le permita elevar el nivel de sus jugadores. Su apuesta por un once tipo de las últimas semanas, con los cambios obligados por lesión o sanción, tras quedarse con un solo encuentro semanal no le ha servido para recuperar la mejor versión del Betis. Sólo cuatro victorias en los 12 partidos de Liga disputados en 2019 es un balance insuficiente para alcanzar la deseada zona europea, y sólo una de ellas ha llegado en el último mes.

Tanto el día del Getafe como ante el Rayo, el equipo verdiblanco reaccionó cuando el técnico movió las piezas para cambiar de sistema, dejando una defensa de cuatro, una posibilidad que apenas puede manejar de inicio ante las lesiones de Júnior y Francis, los dos jugadores que ha empleado como laterales zurdos durante la temporada. Con la recuperación de Guardado, que regresa tras cumplir sanción, Setién ubicará al mexicano entre los titulares, aunque su entrada no será la única que se produzca en un once que requiere de nuevos estímulos.

No aparece Anoeta como una visita más en el calendario verdiblanco y no sólo por la cercanía del final del campeonato. Las sensaciones que transmitió el equipo en Vallecas, tras supuestamente cargas las pilas en la pausa liguera, generan preocupación, por lo que el duelo ante la Real Sociedad servirá para medir tanto el estado de la plantilla como la capacidad de Setién para revertir la dinámica y seguir aspirando a un puesto en una competición europea.