Un grupo de aficionados radicales del Real Madrid, identificados como de Ultras Sur, se están ubicado en la zona del Gol Norte, justo detrás de la portería, una posición que no es habitual para los hinchas visitantes.

El propio Betis ha explicado que, pese a tratarse de un partido de alto riesgo, muchos seguidores ultras madridistas habían comprado entradas en esa zona del estadio a través de la web y la Policía Nacional ha decidido agruparlos para tenerlos más controlados.

Un miembro de seguridad dialoga con los aficionados.

Las fuerzas de seguridad han vigilado a estos ultras que durante toda la jornada, después de que se hayan dejado ver uniformados por Los Bermejales y Heliópolis. Las entradas son de zona de baja visibilidad, donde no se venden abonos y por internet cualquier persona las puede comprar libremente desde hace varios meses, ya que se trata de un encuentro de clase A, según ha explicado el propio club verdiblanco.

El Betis anunció esta tarde que suspendía la venta de localidades "debido a que el partido de hoy ha sido declarado de alto riesgo y por orden de las autoridades pertinentes, la venta de entradas y los servicios al abonado (cesión, préstamo y mejora de abono) se han interrumpido con antelación a las tres horas del comienzo del partido". Fue la Policía Nacional quien advirtió al club para que cerrara esta venta de localidades dada la presencia de Ultra Sur en la capital hispalense.