Westermann y Portillo, a las órdenes de Poyet

El Betis 2016-17 echa a andar hoy con las diferentes pruebas médicas y una doble sesión de trabajo en la que estarán cinco (Durmisi, Jonas Martin, Nahuel, Musonda y Aissa Mandi) de las seis caras nuevas (Felipe Gutiérrez aún está recuperándose de su intervención en la rodilla) y también dos de los jugadores declarados transferibles por Miguel Torrecilla y Gustavo Poyet, Westermann y Portillo.

El central y el centrocampista han decidido no aceptar el permiso que el Betis le ha dado a los futbolistas con los que no cuenta para el nuevo proyecto, con el objetivo de que puedan solucionar su futuro. De este modo, Varela, Vargas, Van der Vaart, Xavi Torres y Kadir han decidido no trabajar a las órdenes de Poyet, aunque cada caso es diferente.

Vargas ha estado trabajando en su país, y tras sonar para Pescara, Boca Juniors y Universitario de Deportes, no ha terminado de encontrar acomodo. Varela podría recalar en el Galatasaray, Van der Vaart ha descartado todas las propuestas recibidas y Xavi Torres, Digard y Kadir tampoco han encontrado, aún, equipo. Así, todo apunta a que acabarán rescindiendo sus respectivos contratos, a no ser que durante el verano, en lo que todavía resta de mercado de fichajes, encuentren una salida. En la misma situación está Portillo, pese a que decidido entrenarse en la vuelta al trabajo, pero la del central alemán puede sufrir un giro radical.

El Betis le ha propuesto a Westermann la posibilidad de seguir en el conjunto verdiblanco, si acepta una reducción de sueldo. El alemán es una de las fichas más altas del plantel y en el conjunto verdiblanco no ven con malos ojos que continúe, siempre que su salario disminuya. En estos momentos, Westermann sigue pensando la propuesta bética, pero mientras tanto ha decidido ponerse a trabajar junto al resto de compañeros.

El teutón lleva todas sus vacaciones en Sevilla, donde se siente muy a gusto con su familia. Incluso, se ha comprado recientemente una casa en la Costa del Sol, por lo que siempre ha tenido claro que su deseo era no salir de Heliópolis e intentar convencer a Poyet. Ahora, tiene en su mano la posibilidad de vestir de verdiblanco otra campaña más (acaba contrato en 2017 aunque con opción a otra).