Del Cerro Grande se jubila, o lo jubilan, al final de esta temporada. No le vendrá mal al Betis, que esta campaña ha padecido los arbitrajes de un colegiado con el que no conoce la victoria y que en los cuatro partidos que ha dirigido al Betis esta temporada el cuadro verdiblanco se quedó en inferioridad numérica.

La historia de amor este curso empezó en Pucela, donde expulsó a Pezzella con roja directa en el minuto 33 en una acción discutida con Óscar Plano. era el último hombre y tras perder la referencia por el bote del balón en la pugna con el jugador local éste un agarrón del argentino fue castigado con la expulsión. Aun así el Betis pudo sacar un 0-0.

Después llegó la Supercopa. También ante el Barcelona. Guardado entró en el minuto 86 cuando el partido se encaminaba a la prórroga. Fue amonestado por una falta en el centro del campo en el minuto 112 y en el minuto 118 fue expulsado con la segunda tarjeta amarilla por otra falta en el centro del campo en el que llega tarde pero sin dureza alguna. El choque se resolvió en los penaltis a favor de los azulgrana.

Después llegó la acción más escandalosa de la temporada. Luiz Felipe fue expulsado con roja directa por una supuesta agresión a Iago aspas que sólo vio Del cerro Grande. El jugador del Celta se echó las manos a las caras aprovechando las malas formas con las que el central intentó quitarle el balón para que o perdiera tiempo cuando el Betis trataba de empatar en la recta final del encuentro. Tampoco el VAR fue capaz de corregirlo.

La última expulsión, el póquer para Del Cerro Grande, se ha producido en el Nou Camp con doble amarilla a Édgar en 11 minutos, la primera de ellas injusta porque el central tocó el balón claramente.

Con la de Édgar ya son 13, más la de la Supercopa, las expulsiones sufridas por el Betis en la temporada cuando es el segundo equipo de la Liga que menos falta hace sólo tras el Real Madrid. Los dos equipos que más faltas hacen son el Mallorca y la Real Sociedad, que en la liga han sufrido sólo tres y dos expulsiones.