Las relaciones tóxicas generalmente siguen tres etapas: idealización, devaluación y descarte. Se pasa de adular por encima de sus posibilidades a la pareja para continuar 'asesorándole' negativamente sobre la mayoría de sus gustos (personales, de comportamiento y vestimenta) y termina por aislarla de sus diferentes entornos para hacerse indispensable. Las relaciones tóxicas generan una necesidad detructiva pero esa destrucción tiene unos inicios que se pueden intuir e identificar. Existen signos de que estás en una relación tóxica, pero también banderas rojas en los principios de una relación que promete ser tóxica ante los que debes estar atent@ para ponerle freno los antes posible.

La inmadurez, el exceso de alcohol y la copia de modelos equivocados en redes sociales y ciertos programas de televisión han terminado normalizando actitudes sumamente tóxicas que, según los expertos, confunden al adolescente sobre qué comportamientos son correctos y cuáles son perjudiciales dentro de una pareja.

Hay determinados actos que cualquiera podría clasificar como de tóxico. La revisión continua del teléfono de tu pareja, el control exhaustivo de su vida o los comportamientos agresivos son algunos de ellos. Sin embargo, hablamos de aspectos que no se suelen dar en las primeras citas o contactos con nuestra incipiente o futura pareja. Gestos y detalles que se pueden comprobar en esas famosas First Dates y que la autora Pulsión de vida en Instagram, autora del libro La estafa emocional: causas, consecuencias y cómo sanar las relaciones con narcisistas y psicópatas, enumera claramente:

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Monopoliza la conversación y no muestra interés genuino en conocerte, hace comentarios humillantes sobre ti, sobre tus gustos, tus intereses o valores; hace comentarios humillantes sobre otras personas; habla muy mal de sus ex (de todos o casi todos), de una manera casi obsesiva; hace referencia a cómo te deberías vestir, cómo deberías pensar, cuándo deberías hablar…

Esta licenciada en psicología abrió el debate y más de 16.000 personas han respondido a la llamada de sus banderas rojas. "Busca romper tus límites, todo le fastidia... hasta él de sí mismo. Te dice cómo debes actuar, incluso se mete en conversaciones para 'mediar' y decirte que lo haces no es correcto, cuando encima él ha tenido comportamientos agresivos con más personas delante pero a él no se le puede criticar nada. Cuando habla de él siempre parece que es Dios. Es gente malvada y siniestra", sentencian sus seguidores a través de los comentarios.

Detalles en una relación sana

Afortunadamente la mayoría de relaciones no tienen nada que ver con este tipo de comportamientos y se basan en una relación de respecto que mantiene unos códigos de conducta mucho más sanos. Mantener conversaciones incómodas, que existan opiniones diferentes acerca de un tema y comunicar nuestras necesidades y límites a otra persona son aspectos fundamentales para conseguir que una relación crezca con los cimientos suficientemente estables para perdurar en el tiempo. Validar las emociones de la otra persona y mostrarse flexible en la negociación conseguirá que la amistad, el amor, la admiración y la felicidad se mantengan para siempre.