Durante las últimas semanas, el ojo de la opinión pública internacional ha girado en torno a uno de los juicios más mediáticos de los últimos años: el acontecido entre Johnny Depp y Amber Heard. Esta semana ha seguido su farragoso avance y conforme pasan los días van surgiendo nuevos y desagradables detalles sobre la 'tóxica' relación que ambos mantuvieron durante 5 años. Según los nuevos testimonios, la psicóloga clínica y forense, Dawn Hughes, ha asegurado que Heard sufrió trastorno de estrés postraumático por el "abuso físico y sexual" de Johnny Depp. 

La psicóloga detalló que la emisión de este diagnóstico llega tras acumular 29 horas de terapia con la actriz y después de haber revisado la grabación de estas sesiones. los resultados han revelado, según indicó la profesional, que Heard no mentía con respecto a sus condiciones mentales y tampoco las exageraba. ''Hay varios indicios de casos de violencia y abusos sexuales constatados en esta relación (...) debido a sus celos obsesivos (de Johnny Depp)", espetó.

Estos episodios pueden deberse, precisamente, a la exposición a situaciones extremas o traumáticas en los que la integridad física se pone en peligro como la guerra, un desastre natural, un accidente automovilístico o una agresión sexual. 

Se trata de un proceso normal en los pacientes que han sufrido o presenciado una experiencia traumática, pero si permanece en el tiempo aproximadamente más de un mes, evitando que se pueda avanzar, se convierte en el trastorno por estrés postraumático. En este caso el mecanismo normal de miedo y huida que genera la mente como una barrera de protección, se torna más grave y desencadena otros síntomas.

Puede ocurrir en personas de todas las edades y es más frecuente en mujeres que en hombres. La genética, la neurobiología, los factores de riesgo y los aspectos personales pueden afectar si tiene este trastorno mental después de un evento traumático.

Síntomas

Pese a que la mayoria de personas ha pasado por una situación emocionalmente traumática o gravemente intensa, muchas logran superarlas con el paso del tiempo, Sin embargo, hay algunas personas que meses después del suceso traumático siguen presentando síntomas y no logran sentirse a salvo de lo ocurrido.

Aparecen cuatro síntomas predominantes: reexperimentación del acontecimiento traumático como una pesadilla o una memoria retrospectiva, evitación de estímulos relacionados con el trauma, embotamiento mental y un estado de hiperactivación.

Además, también puede experimentarse una sensación de soledad y perder el interés en las actividades diarias, así como tener dificultad para concentrarse y dormir. Todo ello acompañado, como hemos mencionado, de un estado de hiperactivación que produce ansiedad, nerviosismo y miedo.

Otros síntomas que acompañan al trastorno son:

• Insomnio
• Ansiedad
• Pesadillas
• Incapacidad para disfrutar
• Miedo a morir
• Hipervigilancia en cualquier cambio de vida y en las relaciones 
• Sensación de culpa o remordimiento
• Pensamientos negativos sobre uno mismo
• Arrebatos de ira
• Episodios de manía persecutoria