La Hermanda de la Estrella congregó a centenares de fieles para su tradicional traslado a la Real Parroquia de Santa Ana, donde celebrará la próxima semana sus anuales cultos cuaresmales. Una vez finalizada la Santa Misa, la cofradía trianera del Domingo de Ramos puso la cruz alzada en la calle San Jacinto, para dirigirse por Rodrigo de Triana y Pelay Correa hasta el citado templo parroquial.

La Escolanía de Jesús de las Penas y un grupo de metales ponían los sonidos a la noche, en la delantera de las andas de Nuestro Padre Jesús de las Penas. Vestida con manto y saya azul marino, María Santísima de la Estrella recibía el canto de sus hermanos antes de ponerse en la calle. Los flashes de las cámaras iluminaban el nacarado rostro de esta Dolorosa del XVII atribuida a la Roldana. Un cortejo de hermanos con cirios acompañaban a las imágenes, rezándose las estaciones del vía crucis.

Si el Señor salía en torno a las ocho y media de la Capilla de la calle San Jacinto, la Virgen ponía el broche al traslado rozando las diez de la noche, a los pies de la torre de Santa Ana. Cabe recordar que el próximo 1 de mayo la corporación se traslada a su Parroquia de San Jacinto, donde se celebrarán sus cultos la cuaresma de 2020. Es decir, al menos es seguro que en 2020 la Estrella no irá a la Real Parroquia de Santa Ana, y no debería descartarse que de ahí en adelante los cultos anuales se celebrasen en la Parroquia de San Jacinto.