Las hermandades de Sevilla, de luto por el papa Francisco: detalles y atuendos en señal de duelo

A primera hora de la mañana de este pasado lunes el mundo al completo contenía la respiración con el anuncio que llegaba desde Roma: el fallecimiento del papa Francisco, recordado por todos como un papa preocupado por el contexto social de su época, por la propagación sincera del mensaje de Cristo y una cierta tendencia aperturista en la Iglesia. Por tal motivo, y atendiendo a su carácter pontificio y de pertenencia a la Iglesia, numerosas hermandades de la ciudad y la provincia han mostrado diversos gestos de duelo y respeto en memoria del Santo Padre, cuyo funeral se celebra en estas horas.

A pesar de estar en tiempo de Pascua, algunas imágenes han sido vestidas de riguroso luto en señal de respeto hacia Francisco. Es el caso, por ejemplo, de la Virgen de las Lágrimas, de la Exaltación, que ha sido ataviada con este color propio del mes de noviembre en pleno abril para recordar tan destacada figura. Asimismo, y prácticamente tras ser bajada del paso, se ha hecho lo propio con la Virgen del Subterráneo de la hermandad de La Cena, que ya recibe culto en su altar en Los Terceros. De igual modo ocurre en la provincia, en el caso de Dos Hermanas, habiéndose vestido de luto a la Virgen del Mayor Dolor.

Asimismo, varias hermandades, algunas de ellas con el título pontificio, han colocado dicha bandera cerca de los pasos procesionales y revestidas de un crespón negro en memoria del papa. Es el caso de la hermandad de Los Estudiantes, ante el paso del Cristo de la Buena Muerte; la Carretería, ante el imponente paso de misterio de Las Tres Necesidades, o el Amor, en la Colegial del Salvador. También ha sido colocado un crespón en la insignia pontificia de la hermandad del Silencio, ante el paso de palio de la Virgen de la Concepción, o en el estandarte de la hermandad de la Sed, o ante la Virgen de la Soledad en su capilla de San Lorenzo.

Además, otras imágenes ofrecen en su vestimenta tras la Semana Santa varios detalles en gesto de duelo. La Virgen del Rosario de San Pablo luce en su cintura una medalla de la cofradía anudada con un lazo negro, y especialmente significativos son los rosarios que porta la Virgen del Amparo de la hermandad de la Misión: uno completamente negro y otro recientemente donado por un grupo de hermanos, con el emblema de Juan Pablo II, y que fue precisamente bendecido por el papa de manera reciente. También la Candelaria porta un rosario regalado por el propio papa, los Dolores de Torreblanca y la Purísima Concepción de Alcosa sendos rosarios negros y la Virgen de Regla luce en el pecho un lazo con los colores amarillo y blanco, distintivo pontificio. Por último, la Macarena ha colocado un lazo negro en la Rosa de Oro, distinción otorgada expresamente por Francisco el pasado mes de diciembre, uno de los acontecimientos más destacados y trascendente en la historia de la religiosidad andaluza y española.