Y conforme pasa la Semana Santa, las cofradías empiezan a desarrollar o retomar proyectos de cara a los próximos meses y así adelantar tareas. Es el caso de la hermandad de la Macarena, una de las tantas que este año no pudo realizar su estación de penitencia por la lluvia. Aún así, la corporación que preside José Antonio Fernández Cabrero ha dado el primer paso de cara al 2025. 

En concreto, la hermandad ha anunciado la realización de una nueva parihuela para el paso de misterio del Señor de la Sentencia, que desde este pasado lunes se encuentra en el taller de Enrique Gonzálvez, en Los Palacios, para ser intervenido. La idea de la junta de gobierno es que la actual se destine únicamente al Museo de la Macarena, con el objeto de que la nueva se emplee para la estación de penitencia de la Madrugada. Dicha parihuela “está pensada para adecuarse mejor a las exigencias del paso en la calle garantizando así una mejor conservación de los respiraderos y la canastilla”, apunta la cofradía macarena. Un avance más en materia de prevención y cuidado del patrimonio material.  

El paso actual del Señor de la Sentencia (tarima y canasto) data del año 1955 y fue realizado en el Taller de Juan Pérez Calvo. La talla corresponde a Rafael Fernández Toro, los medallones y ángeles son obra de Luis Ortega Bru y el dorado lo realizó Antonio Sánchez, siendo nuevamente dorado por Luis Sánchez Jiménez en 1978. Se completa con cuatro relicarios en las esquinas realizados por Fernando Marmolejo Camargo. 

El anterior paso fue realizado por José Gil en 1910, si bien el primer paso sobre el que procesionó la imagen de Felipe Morales fue ejecutado entre 1681 y 1683 por Cristóbal Pérez. Aquel conjunto debió ser muy rico que llamó la atención “en cuanto a su opulencia”, según Arana de Varflora en el siglo XVIII.