Navarro Arteaga talla una Virgen de estilo "art nouveau" para Valladolid
La imagen, bajo la advocación de Nuestra Señora del Sagrario, será titular de la Sagrada Cena de Valladolid
Ha sido tallada en madera de cedro y procesionó la tarde del sábado tras ser bendecida
Impactante. Es uno de los calificativos que podemos atribuirle a Nuestra Señora del Sagrario, nueva imagen devocional para las cofradías vallisoletanas, obra de José Antonio Navarro Arteaga. En concreto ha sido tallada para la Hermandad de la Sagrada Cena de Valladolid que, en su apuesta por la diferenciación y por una marcada personalidad, ha recibido a su titular con un amplio programa de actos.
Tras la realización del Señor, la cofradía de la Sagrada Cena encargó en junio de 2021 al escultor José Antonio Navarro Arteaga una talla para completar el patrimonio de esta hermandad penitencial. Se trata de un modelo iconográfico de la Virgen María que se presenta "en una representación monumental como sagrario primario y supremo de Cristo", tal y como informó la Cofradía, que ya hizo público un boceto de la imagen. Se la circunstancia de que esta Virgen está inspirada en la corriente de renovación artística califica como modernismo o art Nouveau, desarrollada a principios del siglo XX.
Para recibir a la imagen, la cofradía desarrolló durante el pasado fin de semana un amplio programa de cultos, desde una Vigilia Mariana el viernes a modo de espera en San Felipe Neri hasta la bendición, en la Catedral de Valladolid en la tarde del sábado. Después de este acto, la Virgen del Sagrario recorrió en procesión las calles de la ciudad castellanoleonesa hasta la iglesia de San Pedro, sede canónica de la cofradía.
El propio presidente de la Cofradía, Carlos Sanz, explicaba el por qué de la imagen y, sobre todo, su inusual y particular estilo dentro del arte sacro: "Hemos apostado por incorporar una imagen de la santísima Virgen que aporte a la Semana Santa de Valladolid un concepto diferente y que sigue la línea artística de la cofradía".
La Virgen se presenta monumental y con rostro sereno. Muestra su mano derecha extendida para dejar partir a su Hijo a su Pasión, pero sin olvidar que su presencia sigue viva en el sacramento de la Eucaristía instituido en la sagrada Cena. Con la mano izquierda, nos señala su vientre, donde todo empezó, donde el Hijo reposó durante nueve meses convirtiendo a María en el primer sagrario de la historia. Sin duda alguna, un paso más en la imaginería sacra, que encaja perfectamente con la contemporaneidad y permite altas cotas de unción y espiritualidad.
6 Comentarios