Consenso. Ésta es la voluntad del gobierno local y de la federación de comerciantes para aplicar la nueva normativa estatal que persigue pontenciar la actividad económica en las zonas de gran influencia turística a través de la liberalización de los horarios comerciales. Tanto el Ayuntamiento como Aprocom quieren que sea el sector el que se pronuncie a la hora de delimitar las calles en las que se llevará a cabo esta medida, ya que la ciudad hispalense, al superar el millón de pernoctaciones anuales, está obligada a que al menos los establecimientos de las zonas con mayor número de visitantes no tengan límite de apertura los domingos y festivos.

El anuncio realizado por el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, sobre la nueva normativa estatal ha incentivado un debate que se había generado hace unos meses en la capital andaluza. Los comentarios sobre una posible libertad de horario comercial surgieron a finales de 2011 cuando la Comunidad de Madrid implantó esta medida. Entonces el presidente de los comerciantes del centro (Alcentro), Enrique Arias, anunció que Aprocom realizaría un estudio para conocer la postura de sus representandos sobre dicha iniciativa. En aquel momento ya fueron muchos los que se posicionaron contra esta flexibilización, al considerar que el pequeño comercio no saldría en ningún momento beneficiado y que únicamente las grandes superficies lograrían aumentar los ingresos.

El debate ha ido prolongándose los últimos meses hasta que el pasado lunes García-Legaz comunicó que las grandes ciudades en las que se supere el millón de pernoctaciones al año o la visiten más de 400.000 pasajeros están obligadas a establecer una zona de gran afluencia turística donde las tiendas puedan abrir cualquier día de la semana.

El Ayuntamiento, que hasta ahora había permanecido al margen del debate y como mero receptor de las propuestas que le llegaban, anunció el mismo lunes que buscaría el consenso con los comerciantes para delimitar la zona en la que se aplicará la medida estatal una vez que se conozca el contenido concreto de la nueva normativa. En similares términos se expresó ayer el presidente de Alcentro, Enrique Arias, quien adelantó a este periódico que también se buscará el acuerdo con los comerciantes a la hora de desarrollar la ley.

En este sentido, Arias aclaró que el estudio anunciado en invierno estaba previsto realizarse durante el presente mes de julio, pero ante el anuncio de la nueva normativa "tendrá que postegarse a conocerse el contenido de ésta y cambiar los datos que con él se querían conseguir". De este modo, si antes se trataba de averiguar la posición del comercio sobre la apertura sin límite horario de las tiendas, ahora la encuesta de Aprocom tendrá como objetivo conocer las calles que quieren formar parte de la zona de influencia turística.

Por obviedad, calles como Sierpes o el eje Tetuán-Velázquez-O'Donnell -debido a su cercanía con el conjunto monumental de la ciudad- integrarán la nueva demarcación comercial. La duda se encuentra en los enclaves limítrofes del casco antiguo, como son el barrio del Arenal, la zona comprendida entre la Alfalfa y la Puerta de Carmona, el entorno de la Plaza de la Encarnación (bastante revitalizado tras la apertura del Metropol Parasol) o la calle Feria y adyacentes. Todo depende de la voluntad que muestren los comerciantes, aunque Arias ya adelanta que en los pasados meses se comprobó que "hay empresarios tanto a favor como en contra de la liberalización".

Esta medida se propuso a las comunidades autónomas en la Conferencia Sectorial de Comercio Interior, donde también se adelantó que para 2013 pasarán de 8 a 10 el número de festivos en los que los comercios pueden abrir. También aumentarán de 72 a 90 las horas semanales de aperura. Hay que tener en cuenta, en este punto, que la restricción horaria afecta actualmente a las grandes superficies, ya que en Andalucía las tiendas con menos de 300 metros cuadrados pueden abrir todos los días.

La Comunidad de Madrid ha sido la primera de España en permitir esta apertura sin límite horario. El gobierno que preside la popular Esperanza Aguirre persigue con ello, además de dinamizar el comercio, crear 20.500 puestos de trabajo e incrementar en casi 6 décimas el PIB de la comunidad. Esta medida comenzará a aplicarse el 15 de julio.