El Consistorio convertirá el antiguo I.E.S. Murillo en un centro turístico

Primero fue el Muelle de la Sal, luego se pensó en el de Nueva York y ahora parece ser que le ha llegado la hora al Muelle de las Delicias. El Consorcio de Turismo de Sevilla ha iniciado las conversaciones con las administraciones local y autonómica con vistas a convertir la antigua sede del Instituto Murillo, sito en la avenida de la Palmera, en el gran centro de interpretación y atención al visitante pendiente aún de concreción desde el primer mandato de Alfredo Sánchez Monteseirín.

El delegado de Presidencia y Hacienda, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, ha trasladado ya a la Junta de Andalucía la decisión política de recuperar este inmueble, construido para la Exposición Iberoamericana de 1929, una vez que se firme el acuerdo para liberar suelo en la capital donde erigir una nueva sede para el Conservatorio de Danza que aún radica en el edificio. Este centro se trasladará a un solar en Nervión, justo detrás del colegio Borbolla, que actualmente ocupa el parque móvil del Ayuntamiento.

El propio alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, apuntaba por escrito el pasado lunes en el balance de su primer año de mandato que el Centro Turístico está a la espera de resolver su ubicación definitiva "al surgir la posibilidad de utilizar el Pabellón de la República Argentina de 1929 en lugar de edificar uno de nueva planta en el Muelle de Nueva York".

Monteseirín fijó para finales de 2010 la apertura del centro de visitantes que, hasta la fecha, conformaba la actuación estrella del Plan Turístico de Sevilla. Para ello se reservaban casi 5 millones de euros de los 22 comprometidos por Junta y Ayuntamiento en el Plan para proyectos cuya ejecución debían enmarcarse entre 2006 y 2009.

La posibilidad de usar el antiguo I.E.S Murillo abre un nuevo escenario, en tanto en cuanto se recupera un edificio cuya funcionalidad actual flaquea y que, por contra, presenta unas cualidades inmejorables para su reconversión en centro de atención de visitantes: Entrada por la Palmera y fachada al río, posibilidad de complementarse con un gran parking subterráneo en la zona o bien conectarse mediante lanzaderas con otros periféricos; zona de descarga de autocares, consigna o taquilla para guardar el equipaje, aseos públicos, tiendas de primera necesidad e incluso una gran exposición permanente que sirva de guía tridimensional de la ciudad. Además de centro de recepción y punto de partida de itinerarios turísticos y visitas organizadas, tendrá funciones como central de gestión de reservas para actividades turísticas, culturales y de ocio.

El anterior consejero de Educación, Sebastián Cano, anunció en febrero pasado la reversión del inmueble al Consistorio una vez que se construya el nuevo conservatorio de danza y música en Nervión, que tendrá una edificabilidad de 12.000 metros y un presupuesto de 4 millones de euros. Hasta su traslado a Nervión, todavía sin fecha, no será posible iniciar las obras de readaptación del edificio.