El servicio municipal del zoosanitario ha llevado a cabo durante los primeros cinco meses de 2020 más de 3.000 actuaciones, lo que supone un incremento de casi un 50% respecto al mismo periodo del año pasado. Este aumento responde principalmente a la labor desempeñada a partir de la declaración del estado de alarma por la pandemia por el Covid-19, que se ha centrado en las desinfecciones en residencias de mayores, equipamientos y espacios con más afluencia de personas y en las tramitaciones para la adquisición de equipos de protección para todos los servicios públicos.

Durante estos meses el servicio ha contado con un incremento de plantilla del 30%, que ahora se mantiene para garantizar la prestación de los trabajos propios de los meses de verano en desinfección y desratización. En este sentido, los próximos días se licitará un refuerzo de las actividades de control de organismos nocivos en la ciudad por un importe aproximado de 80.000 euros.

Recientemente ha sido adjudicado, y se está recibiendo el suministro ya, el contrato de adquisición de productos biocidas y otros elementos de control de organismos nocivos, que permita a este servicio desarrollar su actividad con total normalidad. Este contrato, con una vigencia de dos años, asciende a 90.000 euros.

Incremento de abejas y avispas

Este 2020 está marcado por un incremento de los himenópteros (abejas y avispas). Durante los primeros cinco meses del año se han atendido 207 servicios de abejas y 51 de avispas, repartidos por toda la ciudad, aunque la mayor parte de los casos se han concentrado en el Distrito Este, Norte y Cerro-Amate. Si se comparan con la anualidad anterior, los servicios se han incrementado en torno a un 85% en el caso de las abejas y en un 11% en el caso de las avispas. Cabe señalar que durante los servicios de este tipo de himenópteros se busca rescatar al enjambre para posteriormente cederlo a apicultores profesionales.

“El servicio del zoosanitario ha desempeñado una labor fundamental durante los meses del estado de alarma centrada en la desinfección de equipamientos y espacios públicos. Una vez superada esa prioridad, se han retomado los trabajos habituales de desinfección, desinsectación y desratización que se están llevando a cabo con normalidad y con un refuerzo en las prestaciones y con nuevas iniciativas puestas en marcha”, ha explicado el delegado de Bienestar Social, Empleo y Planes Integrales, Juan Manuel Flores, quien ha puesto como ejemplo el proyecto piloto que se desarrolla con el área de Transición Ecológica para el control de roedores en parques con un nuevo modelo de papeleras.

Durante la crisis sanitaria, desde pocos días después de decretarse el estado de alarma, se incrementó con empleados públicos en un 50% la plantilla de los técnicos aplicadores de los productos biocidas -desinfectantes-, así como de conductores. También e procedió a contratar por el procedimiento de emergencia una empresa que reforzase estas labores durante dicho periodo por un coste de 440.000 euros, lo que ha permitido desinfectar 2.100.000 metros cuadrados de superficies y 400.000 metros cúbicos de volumen (según la técnica empleada). Dichas cantidades supone un incremento del 1.000% respecto al mismo periodo del 2019.

Equipos de protección individual

La otra gran línea estratégica que se ha desarrollado ha sido la adquisición y distribución entre los empleados públicos municipales de equipos de protección individual y otro material profiláctico, lo que ha hecho posible que los servicios municipales pudieran prestarse sin interrupciones durante el estado de alarma, al garantizar la seguridad de los trabajadores. Esto ha sido posible gracias a un intenso rastreo de un mercado muy complicado, donde la demanda superaba de manera descomunal a la oferta y con una inversión de 1.700.000 euros.

Desde la finalización del estado de alarma, el negociado de control de plagas del Ayuntamiento de Sevilla sigue suministrando estos equipos de protección a los empleados municipales para el desempeño efectivo de sus funciones y se continúan realizando, aunque con menor intensidad, trabajos de desinfección.