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Sevilla

Detenido un pirómano por prender fuego a las calesitas de Triana

Las 'calesitas' de Triana, precintada por la Policía el pasado sábado.

Las 'calesitas' de Triana, precintada por la Policía el pasado sábado. / José Ángel García

La Policía Nacional detuvo la madrugada del sábado a un pirómano que intentó quemar el autódromo infantil León, la atracción para niños ubicada desde hace más de sesenta años en la plaza de San Martín de Porres y que se conoce popularmente como las calesitas de Triana.

La instalación sufrió sólo daños parciales, puesto que hubo testigos que vieron al incendiario y llamaron a la Policía. Un patrullero de este cuerpo arrestó al sospechoso, un hombre de unos 50 años que podría padecer algún tipo de trastorno mental.

Lo que se quemó fue la cortina de color azul que cubre la estructura cuando está cerrada y unos cables, pero la atracción seguía funcionando correctamente la mañana del sábado. Un equipo de la Policía Científica hizo una inspección ocular en la zona para tratar de confirmar la autoría del incendio con vestigios biológicos y huellas dactilares.

La Policía investiga ahora si el pirómano es el mismo que quemó el puesto de Jimy, el vendedor ambulante cuyo puesto salió ardiendo el 21 de mayo, un incendio que desató una ola de solidaridad entre los vecinos de Los Remedios y entre los propios policías nacionales. El quiosco de este hombre estaba situado en la calle López de Gómara, frente a la Jefatura Superior de Policía, a unos 500 metros de donde se encuentra el autódromo.

Las calesitas de Triana son una atracción histórica de la ciudad, y su primera licencia data del 18 de julio de 1936, el día del golpe de Estado de Franco y del inicio de la Guerra Civil. En la ubicación actual, en la puerta del mercado de San Gonzalo, lleva desde 1960.

Hace unos años, estos cacharritos estuvieron a punto de desaparecer por una reurbanización de la zona, lo que motivó una movilización vecinal y una recogida de firmas que consiguió que la atracción permaneciera en el mismo sitio. Tampoco la obra de un pirómano ha podido con ella.

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