El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, frente a las protestas de la plataforma ciudadana constituida contra la instalación de un nuevo tanatorio en una parcela del polígono Carretera Amarilla enclavada entre las avenidas de Montes Sierra y Padre Javier María Javierre, ha insistido este jueves en que el proyecto "tiene todos sus papeles en regla".

Ante la nueva manifestación promovida por el colectivo, y con la obra ya en marcha para la construcción de un inmueble de tres plantas y 1.650 metros cuadrados destinado a ser gestionado por Fuascen, Juan Espadas ha explicado que se trata de una "iniciativa privada" en un suelo particular y no de una "decisión política" del Ayuntamiento hispalense, que ha concedido la licencia solicitada porque el proyecto "cumple los requisitos" necesarios para este tipo de iniciativas.

"El proyecto tiene todos sus papeles en regla", se ha encogido de hombros el alcalde, quien insiste en que la concesión de la licencia de obras es un simple acto "reglado" ante una iniciativa que se ciñe a los "requisitos" exigidos. Por eso, ha manifestado que si el colectivo de vecinos ve vulnerado algún derecho o normativa, lo mejor es "que acudan al juzgado". "Si un juez les da la razón, ejecutaremos en ese sentido", ha dicho el alcalde, toda vez que en efecto, el colectivo planea impugnar la licencia de obra en cuestión.

Recreacion del tanatorio.

La iniciativa, en cualquier caso, ha despertado el recelo de numerosos vecinos por localizarse, según los mismos, "a pocos metros de una zona residencial que cuenta con guarderías, parques infantiles y colegios en sus inmediaciones", así como muy cerca de un centro comercial, "con varios supermercados y locales de restauración para el disfrute de los vecinos y visitantes del barrio".

Temen los vecinos, además, "dificultades añadidas" en materia de tráfico y aparcamientos, "la más que previsible llegada masiva de gorrillas, convirtiendo el barrio en algo que no es a día de hoy", y la "devaluación del precio de las viviendas".