Un solar del Ministerio de Fomento se reserva para levantar sobre él la futura comisaría de la Policía Nacional en el Polígono Sur. La parcela en cuestión está en la calle Padre José Sebastián Bandarán, una avenida del barrio que está actualmente en rehabilitación en el marco del plan Urban. Ésta es la nueva ubicación que se baraja como definitiva desde diciembre de 2014.

El día 2 de aquel mes, las tres administraciones -Junta de Andalucía, Ayuntamiento de Sevilla y Gobierno central- se reunieron para tratar el asunto junto con al comisionada del Polígono Sur, María del Mar González. En aquel encuentro, celebrado en el centro cívico El Esqueleto, se descartó definitivamente la anterior ubicación propuesta, en un solar de la Oliva, muy cerca del colegio Fray Bartolomé de las Casas. Para poder destinarlo a la edificación de la comisaría había que resolver previamente un trámite que implicaba modificar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), lo que suponía una demora de al menos dos años para poder firmar la cesión del suelo.

La oficina de la comisionada propuso entonces este solar de Padre José Sebastián Bandarán. Las tres administraciones estuvieron de acuerdo en destinarlo a la futura comisaría de la Policía, un proyecto que los vecinos del barrio llevan 35 años reclamando y que aún tendrán que esperar varios años para poder ver en pie. Para dar el visto bueno definitivo, sólo falta un informe que debe emitir la Gerencia de Infraestructuras de Seguridad del Estado (Giese), un organismo dependendiente del Ministerio del Interior. Este informe debe decidir si la ubicación propuesta reúne las condiciones técnicas y de seguridad necesarias para levantar en él una comisaría de la Policía Nacional.

Desde diciembre, cuando se reunió la comisión interadministrativa, hasta hoy, no se ha producido aún ninguna novedad. Es decir, Interior lleva casi nueve meses elaborando el informe que decidirá si la comisaría se puede ubicar definitivamente en Padre José Sebastián Bandarán o hay que volver a empezar y buscar una nueva parcela. El solar reúne en principio todas las condiciones de seguridad, puesto que está en una zona alejada de las viviendas, de manera que no se les podría lanzar ningún objeto a los policías ni sobre el edificio desde los bloques más próximos, que están separados del solar por dos avenidas bastante amplias.

Además, la parcela está en el centro del Polígono Sur, lo que supone también un gesto de cara a los vecinos, que siempre han temido que finalmente el edificio se ubicara fuera del barrio. Está rodeada de equipamientos públicos. En su entorno hay un centro de salud, un centro de adultos, un instituto, un colegio y unas intalaciones deportivas, así como una iglesia católica y otro templo mormón.

De tener la aprobación de la Gerencia de Infraestructuras, sólo faltaría la cesión del suelo del Ministerio de Fomento al del Interior, un simple trámite que al tratarse de la misma administración no debe plantear ningún problema. El proyecto para la anterior ubicación está hecho y habría que adaptarlo a este nuevo solar. Diversas entidades vecinales del barrio ya conocen el solar y sus representantes se han mostrado satisfechos con el plan, ya que está situado en el centro del Polígono Sur y con facilidad de acceso desde todas las zonas del barrio. Tampoco está en un lugar especialmente conflictivo, lo que permitiría a los ciudadanos acudir a renovar su documentación y a presentar denuncias sin tener que pasar por zonas del barrio mucho más degradadas.

El problema con el que se enfrenta el proyecto es la financiación. En los Presupuestos Generales del Estado para 2016, el Gobierno central ha destinado sólo 255.000 euros para las comisarías de la Policía en Sevilla. Esta cantidad se antoja insuficiente incluso para poder iniciar las obras.