El delegado de Cultura de la Junta se opone al plan del equipo de Juan Ignacio Zoido (PP) en la Alameda y la Gavidia con los argumentos actuales. Bernardo Bueno, delegado provincial de Cultura y presidente de la Comisión de Patrimonio, uno de los organismos que deben estudiar y dar o no el visto bueno a la petición del Ayuntamiento de Sevilla de construir un aparcamiento subterráneo en la Alameda y convertir el edificio de la Gavidia en un centro comercial, mostró ayer a las claras su oposición. "No estoy de acuerdo con un uso comercial para estos espacios. El Ayuntamiento tiene que respetar los usos aprobados en el Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) y asumir esa responsabilidad", dijo Bueno .

El responsable socialista afirma que los argumentos actuales dados por el Consistorio no justifican estos cambios del plan urbanístico de la ciudad aprobado en 2006 que prohíbe expresamente aparcamientos de rotación dentro del centro y fija para el edificio de la Gavidia un uso sociocultural. "Aparte de conseguir dinero por estos cambios, ¿hay alguna otra razón? El dinero no lo justifica. Tiene que haber otros argumentos que hasta ahora desconocemos tal como lo ha planteado el Ayuntamiento", se preguntó en declaraciones a este periódico.

Bueno aclaró que, en el caso de la Alameda, el plan prohíbe taxativamente los aparcamientos rotatorios dentro del centro "especialmente en los espacios protegidos y la Alameda es uno de ellos". Y añadió que un parking supondría una vuelta atrás y establecer normas que ya se rechazaron en su momento. Respecto a la Gavidia, Bueno aclara que "al estar a menos de 50 metros de la antigua Capitanía tiene que pronunciarse la Comisión de Patrimonio" que él preside.

Según Cultura, requiere, como mínimo, un año y medio de trámites para materializar el cambio, ya que deben pronunciarse todas las administraciones y los ciudadanos opinar en información pública. "No puede hacerse sin ningún afán de respetar el plan", dijo.

Sobre la Gavidia, no está de acuerdo con uso comercial del edificio porque el plan urbanístico dice que este suelo debe tener uso sociocultural (biblioteca, archivo, casa de la cultura, centro cívico..) y que cualquier modificación debe contar con el visto bueno de la consejería de Cultura porque el edificio está a menos de 50 metros de la antigua Capitanía.

La Consejería de Obras Públicas de la Junta, la otra administración que debe autorizar un cambio en el plan, avisó al alcalde de que si elimina estos dos equipamientos debe ser a cambio compensaciones a la ciudad. Cruz Villalón aclaró que "la modificación de uso de no lucrativo a lucrativo lleva una serie de compensaciones y, si el documento las contempla, será aprobado". Explicó que un ayuntamiento puede cambiar un plan si se ajusta a la legalidad urbanística o sectorial y que habrá que analizar el impacto que tiene en cada sector urbano ese cambio de uso, aunque insistió en que desconoce el alcance del cambio de modelo de ciudad que quiere hacer Zoido.