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Sevilla

Movilización en la red

  • Más de medio millón de personas procedentes de toda España se unen a través de la red social 'Tuenti' para colaborar en la búsqueda de la adolescente por internet

Más de medio millón de personas se han movilizado por internet para buscar a Marta del Castillo Casanueva, la joven de 17 años desaparecida el sábado en la barriada de Tartessos. El caso ha generado una oleada de solidaridad a través de las dos redes sociales más extendidas entre los internautas, Tuenti y Facebook. Sobre todo en la primera de estas dos páginas, en la que la joven desaparecida tiene una cuenta, el llamamiento ha tenido una enorme repercusión.

En la red Tuenti una de sus amigas, Alba Roldán, ha creado un evento al que se puede acceder tecleando en el buscador el nombre de la joven desaparecida. A este llamamiento se habían sumado, a las diez de la noche de ayer, 503.565 personas. En la página aparece una fotografía de Marta, con una descripción de la joven, los teléfonos de la Policía Nacional y la frase "No es una broma" para dejar claro que no se trata de ningún bulo o rumor difundido a gran escala por internet.

El evento tiene ya más de 7.000 comentarios en la web procedentes de jóvenes de toda España que muestran su apoyo a la familia. La información se ha reenviado a cientos de miles de personas, ya que cada uno de los que la ha recibido se la ha vuelto a enviar a todos sus contactos.

En esta red social, favorita entre los adolescentes, tiene cuentas de numerosos amigos de Marta, que ya han lanzado la idea de organizar concentraciones de protesta en los próximos días. El padre de la joven, Antonio del Castillo, explicó ayer que la familia todavía no contempla la posibilidad de emprender una medida de este tipo, pero lo estudiará en los próximos días.

La cuenta de Marta permanece inactiva desde su desaparición y los cambios que ha registrado en las últimas horas son los que han hecho sus amigos. Antes de la noche del sábado, Marta dejó la frase "mjor Q nunca..xD sicarioss osQ" (sic) junto a su nombre completo. La imagen que ilustra su perfil en Tuenti es una tira vertical con varias fotografías de la adolescente salpicadas con la leyenda "Dejó de ser un juego cuando me dijiste te quiero", escrita con letras de colores.

También se ha creado un perfil bajo el nombre "Todos somos Marta del Castillo Casanueva". En Facebook se ha constituido un grupo que cuenta ya con 1.721 miembros en el que también se ofrece información y fotografías de la joven desaparecida en la calle Argantonio. En este caso lo ha creado una persona que no conoce a la desaparecida, pero quería colaborar de alguna manera. En el muro de este grupo hay casi 200 comentarios de apoyo a la familia de Marta.

Las redes sociales no son los únicos instrumentos de internet al servicio de la búsqueda de Marta. Además del reenvío masivo de correos electrónicos, los amigos han colgado en Youtube varios vídeos en los que publican todas las fotografías disponibles de la joven. Cada uno de estos vídeos -el más largo dura cuatro minutos- tenía anoche más de 500 reproducciones pese a que se habían colgado a media tarde.

Dos grupos de la Policía trabajan a destajo para esclarecer el caso

La familia de la joven desaparecida sólo tiene agradecimientos, tanto para las autoridades como para todos aquellos que han mostrado su solidaridad en las últimas horas.

También para el trabajo de la Policía Nacional, que mantiene a dos grupos de investigación trabajando en el caso. A la hora de cierre de esta edición, todavía no existía ningún indicio para descartar ninguna hipótesis y los miembros del Grupo de Menores (Grume) de la Jefatura sevillana trabajan con un amplio abanico de posibilidades que van desde el rapto hasta la marcha voluntaria de la adolescente. Para intentar arrojar algo de luz sobre el asunto se está investigando a fondo el ordenador de la joven y también un diario que tiene. Marta es muy aficionada a internet y tiene decenas de contactos con los que chatea, según explicó ayer el padre.

En cambio, no es una persona que salga mucho. "Sólo salía los fines de semana y la dejábamos hasta las once de la noche, salvo alguna ocasión especial en la que siempre volvía a casa acompañada. Si se retrasaba llamaba por teléfono para avisar. Muchas veces volvía incluso antes de la hora porque sus amigos suelen ir al fútbol y ella prefiere regresar a casa".

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