La N-IV se ha convertido en el escenario de una guerra política, una más, entre el PP y el PSOE. Los dos grandes partidos políticos tradicionales se acusan entre sí del elevado número de muertos en accidentes que ha registrado esta carretera y del retraso que empiezan ya a acumular las obras del desdoble. Si ya el PP decidió utilizar la carretera como arma electoral cuando anunció el desdoble dos días antes de las elecciones del 20 de diciembre y dio la orden de comenzar las obras tres semanas antes de las del 26 de junio, ayer fue el PSOE quien recriminó a los populares la lentitud de los trabajos.

La secretaria general del PSOE de Sevilla reunió a los alcaldes y concejales socialistas de la comarca del Bajo Guadalquivir (Los Palacios, Lebrija, Las Cabezas y El Cuervo) y emplazó a los medios en la salida del peaje de la autopista AP-4, junto a la Venta el Pan. Allí, con el ruido de camiones de fondo, exigió no sólo que se desdoble toda la carretera N-IV entre Dos Hermanas y Jerez de la Frontera, sino que se liberalice cuanto antes el peaje de la AP-4.

"Llevamos décadas reivindicando que esta situación es insostenible. Los datos están ahí. Cien vidas en los últimos quince años se han perdido en esta carretera. El desdoble es urgente y necesario para comunicar dos provincias como Sevilla y Cádiz", dijo. Lo que obvió Pérez, claro, fue que de esos quince años hubo ocho con un presidente del PSOE en la Moncloa.

Los socialistas insistieron en la necesidad de hacer un desdoble completo de la carretera, de los 70 kilómetros que separan Dos Hermanas y Jerez de la Frontera. Las obras de ampliación de la N-IV se iniciaron en junio, pero sólo en un tramo de ocho kilómetros entre Dos Hermanas y Los Palacios. "Hace unos meses, de cara a las elecciones de diciembre, vino la ministra a anunciar las obras del desdoble. Luego conocimos que estaba anunciando un desdoble de ocho kilómetros. Por cierto, la obra se inició días antes de las elecciones de junio", recordó la secretaria del PSOE de Sevilla, que lo calificó como "una muestra más de que los ministros del PP sólo vienen a Andalucía en campaña electoral, con falsas promesas que después no se cumplen".

Verónica Pérez lamentó que el ritmo de las obras sea "irrisorio". "El desdoble de los 70 kilómetros, a ese ritmo, no lo van a conocer ni nuestros hijos ni nuestros nietos", criticó, para anunciar una serie de iniciativas parlamentarias para que la obra de esta carretera sea un "compromiso real" y que se liberalice el peaje de la AP-4 como "solución más inmediata". Aún así, no bastaría con la liberalización del peaje, puesto que se colapsaría la autopista debido a los más de 20.000 vehículos que circulan por ella a diario, que se sumarían a los 22.000 que lo hacen por la N-IV. Para los socialistas, es necesario ampliar también a dos carriles por sentido toda la N-IV.

Será una obra cara, sobre todo teniendo en cuenta que el tramo de ocho kilómetros requiere una inversión de 43 millones. "Sí, pero es que son décadas pidiéndola. En las radiales de Madrid, por las que apenan pasan coches, ha invertido también millones y millones de euros, cuando esta obra es más necesaria".