La portavoz adjunta del Grupo Popular en el Ayuntamiento, María del Mar Sánchez Estrella, ha alertado del inicio este martes del proceso de peatonalización de la calle Betis, "que ha comenzado con la eliminación de 35 plazas de aparcamientos en la calle Pureza sin que se haya informado ni tratado el asunto en la comisión creada ex profeso para abordar la movilidad de estas dos calles del barrio de Triana".

En este sentido, Sánchez Estrella ha explicado que "en la mañana de hoy el Ayuntamiento ha procedido a instalar señales de prohibido aparcar en toda la acera izquierda de Pureza, con lo que se están eliminado de golpe y porrazo unas 35 plazas de aparcamientos con el más que probable objetivo de ir despejando la vía para acoger el tránsito de automóviles que actualmente tiene Betis, y que quedaría suspendido tras la peatonalización"; y ha añadido que "esta medida se ha vuelto a hacer de manera sorpresiva, sin consultar, sin avisar y de espaldas a los afectados".

Así, la portavoz adjunta del PP ha lamentado que, en el asunto de la peatonalización de la calle Betis, el gobierno de Espadas está haciendo "política de hechos consumados, creando una comisión para luego desentenderse de ella, sin tratar los asuntos en la Junta Municipal del Distrito y sin escuchar a vecinos y comerciantes”; y ha resaltado que "este el ejemplo de la política autoritaria de Espadas, que dice una cosa de cara a la opinión pública y después hace lo contrario sin consensuar nada a pesar de que gobierna en minoría".

De igual modo, Sánchez Estrella ha retado a Espadas "a que diga la verdad y cuente sus planes e intenciones con respecto a la calle Betis, porque la semana pasada dijo con muy buen talante que se hablaría con todos los afectados y que la peatonalización sería parcial previa a la presentación de un proyecto concreto, pero hoy nos hemos levantado con las primeras medidas de reordenación del tráfico sin que hasta el momento conozcamos nada de nada".

De esta manera, Sánchez Estrella ha afirmado que “ya conocemos la actitud despótica y autoritaria de Castreño, con decisiones condenadas por los tribunales, y siempre con el visto bueno del alcalde”; y ha sentenciado que “Espadas pone siempre la buena cara y las buenas palabras, y su delegada hace todo lo contrario con su connivencia”.