La acusación particular en el caso del atropello mortal de una mujer en Palmete, provocado por un camión de Lipasam que circulaba marcha atrás, ha pedido al juzgado de Instrucción número 8 de Sevilla que tome declaración en calidad de investigado a un alto cargo de la empresa municipal de limpieza. Se trata del jefe de tráfico de la recogida de residuos urbanos, que ya compareció ante la juez del caso en calidad de testigo. Ésta es una de las pruebas que ha pedido la acusación particular, que ejerce el abogado Javier Jaenes, del bufete Montelirio, en representación de la familia de la víctima, María Luisa Pleguezuelo.

El accidente ocurrió a las diez y veinte minutos de la mañana del 10 de abril en la calle Ayamonte. Pleguezuelo, de 40 años, cruzaba la calle cuando fue atropellada por un camión de la basura que iba marcha atrás, realizando una maniobra indebida que era habitual entre los conductores que prestan servicio en esta zona para ahorrarse tener que dar un rodeo. El conductor que provocó el siniestro permanece investigado como presunto autor de un delito de homicidio imprudente. En su declaración, negó tajantemente que circulara marcha atrás pese a que así lo demuestran el GPS del camión, las manchas de sangre, la posición del cuerpo de la víctima y el relato de varios testigos.

El abogado de la acusación particular basa su petición en que el jefe de tráfico colocó en un puesto de carácter técnico a un trabajador que acababa de reincorporarse de una baja tras un periodo de incapacidad temporal. En su declaración como testigo, el 23 de abril, este alto cargo de Lipasam reconoció que el conductor que provocó el atropello tenía una limitación funcional en la movilidad del hombro, debido a que había sufrido otro accidente y había volcado un vehículo especial. Además, "admitió que pudiera haber estado de baja por afecciones psicológicas".

La calle Ayamonte tras el accidente.

"En la medida en que dispuso la reubicación del trabajador limitado en un puesto donde las capacidades del conductor han de estar plenas -en atención a las características y pericia necesarias para la conducción de un vehículo de dichas características- se habrá de proceder a la citación de éste", dice el escrito presentado por el abogado de la familia de la víctima.

Este letrado, Javier Jaenes, también ha pedido que se tome declaración como investigado a otro trabajador de la compañía, que ya declaró como testigo el día 20 de abril. El conductor imputado por el accidente declaró que no se había percatado de que atropellara a nadie y llegó a deslizar que podía haberlo hecho su compañero que había hecho la misma ruta instantes antes. Por ello, para que se aclare la posible implicación de este segundo trabajador, el abogado solicita su declaración como investigado.

Atestado de la Policía Local

La Policía Local ha entregado ya en el juzgado una segunda ampliación del atestado del accidente. En este informe, los agentes de la Oficina de Gestión de Atestados (OGA) de este cuerpo confirman que el camión de Lipasam iba dando marcha atrás por la calle Ayamonte. Esta ampliación recrea el recorrido de la víctima en los momentos previos al atropello y detalla que la mujer, que estaba casada y tenía dos hijas de 9 y 5 años, acudió al banco y paseó a su perro. También estuvo en un bazar y fue grabada por las cámaras de seguridad de este establecimiento unos minutos antes del accidente.

En cuanto al atropello, el atestado de la Policía Local dice que la mujer salió de entre dos coches aparcados, una tesis que el abogado de la acusación rebate y asegura que estaba cruzando por el paso de peatones. Una testigo corroboró que María Luisa Pleguezuelo cruzaba "siempre, siempre" por el paso de peatones, que además está ubicado a escasos metros del lugar en el que se produjo el accidente, como se aprecia en la foto que ilustra esta página.