El plan del SAS contempla reducir a más de la mitad las cirugías fuera de plazo en Sevilla
La Junta quiere que los 12.695 sevillanos en lista de espera quirúrgica y que superan el máximo legal bajen a 5.113 a final de año
La inversión supera los 77 millones en la provincia: 38 para contratos con la privada y 39 para horas extraordinarias y autoconciertos
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Con más demoras para operarse, más pacientes en las listas de espera quirúrgica y cerca de 100.000 enfermos que superan los plazos límite para intervenciones y consultas, la Consejería de Salud ha asumido que gestionar la saturación de la sanidad andaluza es un reto obligado y así se lo planteó ya a final del año pasado cuando se anunció la adopción de medidas extraordinarias para tratar de reducirlas. Sevilla no escapa a este problema y, los más de 12.700 pacientes en los que se vio incrementada entre 2022 y 2023 una lista de espera que cerró el año pasado con 36.253 sevillanos esperando entrar en quirófano, son razón más que suficiente para una actuación que, traducida en inversión económica, supera los 77 millones.
Según los datos facilitados por la Consejería a este periódico, esa es la inversión destinada a este cometido en la sanidad pública sevillana dentro del llamado Plan de Garantía Sanitaria que la Junta de Andalucía presentó el pasado febrero y que cuenta con una inversión total de 283 millones para toda Andalucía. En Sevilla, está previsto que en diciembre de 2024 queden pendientes de una cirugía 29.575 pacientes. Además, se pondrá especial atención a aquellos casos en los que el tiempo máximo establecido por la normativa para ser atendido por el SAS ya se haya superado. Así, si a cierre de 2023 eran 12.695 los sevillanos que se encontraban en esta tesitura, la idea es que a final de de este año se cifra se reduzca más de la mitad, hasta los 5.113.
Para conseguirlo, la Consejería de Salud que dirige Catalina García contempla dedicar unos 39 millones a pagar incentivos a los profesionales sanitarios por su productividad a través de continuidades asistenciales, mediante horas extra y autoconciertos; y más de 38 millones para derivar pacientes a la sanidad privada, invertidos en contratos y negociados sin publicidad, es decir, acuerdos con centros sanitarios privados externos.
Por su parte, a nivel práctico, el plan del SAS prevé que los hospitales y centros sanitarios de la provincia, de gestión propia o contratados en la sanidad privada para dicho fin, realicen a lo largo del año unas 6.678 intervenciones quirúrgicas para cumplir su previsión y lograr reducir la lista de espera de pacientes dentro del sistema de garantías, que contempla plazos de 180 días, 120 y 90, según el tipo de intervención, de las 36.253 personas de diciembre de 2023 a las 29.575 con las que se espera cerrar 2024. Con todo, fuentes de la Consejería de Salud insisten en que estas cifras son "estimaciones" y que responden a una "previsión" realizada por el departamento en base a estas inversiones y los recursos a destinar pronosticados.
Entretanto, resulta paradójico que mientras desde la Administración se afanan en anunciar medidas para reducir listas de espera, las críticas a la gestión de las mismas fue una de las consignas que más se corearon el pasado domingo por las calles de Sevilla en una nueva protesta en defensa de la sanidad pública convocada por el movimiento Marea Blanca. Una manifestación que comenzó su recorrido en José Laguillo y en la que las quejas por las listas de espera y la falta de personal sanitario acapararon el mayor protagonismo.
La protesta, que se repitió en todas las capitales de provincia andaluzas, coincidiendo con la celebración del Día Mundial de la Salud, se secundó en Sevilla bajo cánticos como "este presidente se ríe de la gente" o "es un acto criminal recortar la sanidad", en línea con la denuncia del deterioro de los servicios sanitarios públicos con "demoras excesivas y listas de espera realmente escandalosas".
Respondió la Junta y, momentos antes de la cita convocada por Marea Blanca, difundió a los medios un audio con declaraciones de la delegada territorial de Salud en Sevilla, Regina Serrano, quien defendió "la incuestionable apuesta del Gobierno de Juanma Moreno" por la sanidad pública en la provincia.
"Más de 50 nuevas infraestructuras sanitarias, 668 millones de inversión en equipamientos de alta tecnología y si nos centramos en la provincia de Sevilla, la media anual de inversión en el periodo 2019-2023 es un 221% más que en el periodo 2011-2018. Son 13,2 millones de euros de media frente a 44 millones de media de inversión en los últimos años. Se han presupuestado desde el 2019 más de 218 millones de euros en infraestructura para nuestra provincia", argumentó Serrano, quien aprovechó para destacar, además, la puesta en marcha del Hospital Muñoz Cariñanos, el antiguo hospital militar; el Hospital Macarena Cartuja, en ejecución; o las mejoras en las urgencias de Osuna o del Hospital Macarena, así como la ampliación del Centro de Salud de Pino Montano y un alza de 23.840 profesionales en 2018 a4.607 profesionales más actualmente.
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