La negociación entre Sacyr y el Ayuntamiento sigue tras el acuerdo firmado la semana pasada para que la concesionaria pueda cobrar hasta diez euros a los turistas que compren su entrada para subir al mirador de las ‘setas’ a cambio de derogar la compensación que sale de las arcas municipales por el acceso gratuito de los sevillanos a ese espacio y el mantenimiento de la plaza de abastos. Ahora toca el turno de fijar un plan de usos para que la plaza Mayor sea más transitada por los ciudadanos y el precio de la entrada, que tendrá una subida paulatina.

En los encuentros que han mantenido en las últimas semanas la constructora y el gobierno socialista se ha fijado como fecha tope para definir ese plan de usos antes del verano. La idea es que el Ayuntamiento realice en este espacio de la estructura de madera diseñada por el arquitecto Jürgen Mayer algunos de los eventos que celebran en otras zonas de la ciudad. Los técnicos se encuentran definiendo qué tipo de actividades acogerá esa zona de la Plaza de la Encarnación.

Hay otra tarea pendiente. La puesta en uso de la antigua sede de la delegación municipal de Hacienda, que es propiedad de Sacyr en función del convenio al que llegaron esta empresa y el gobierno presidido por el socialista Sánchez Monteseirín dentro del acuerdo general de construcción y explotación del Metropol Parasol.

El edificio, que lleva cerrado durante más de cuatro años, se comercializa para oficinas. Sacyr espera cerrar un acuerdo pronto, ya que las negociaciones se encuentran bastante avanzadas con una empresa interesada. El inmueble tiene una superficie de 5.955 metros construidos, distribuidos en seis plantas, un ático y un sótano con capacidad para diez plazas de aparcamiento y almacén. La parcela está destinada a usos terciarios, lo que permite la ubicación de oficinas, comercios, tiendas y hospedaje. Un portal inmobiliario recoge que el alquiler es de 60.000 euros al mes.

Negocia la puesta en uso del edificio de la Encarnación que fue sede de la Hacienda local

Estas dos tareas quedan pendientes tras el acuerdo con el Consistorio, por el que seguirá manteniendo la gratuidad de las visitas de los ciudadanos que acrediten su condición de haber nacido o ser residentes en el término municipal de Sevilla, y asumiendo el mayor importe anual de los gastos de mantenimiento preventivo que exceda al importe de las cuotas que se abonan por parte de los placeros sin que Sacyr deba reclamar compensación por este concepto a la Gerencia. Los gastos de mantenimiento correctivo no quedan contemplados en esta compensación.

La cuantía máxima de diez euros será la correspondiente al ejercicio 2019, quedando facultada la constructora a actualizar automáticamente ese límite tarifario el 1 de enero de cada año con el incremento del IPC interanual experimentado en España en el año anterior.

Esta adenda al contrato del concurso público correspondiente a la obra pública de renovación de la Plaza de la Encarnación y su entorno supone un ahorro anual para las arcas municipales. Desde la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) del 6 de octubre de 2015, el Ayuntamiento viene compensando a Sacyr con un euro por visita la entrada de los sevillanos. La última fecha de abono por este concepto fue el 1 de mayo de 2017. El saldo vigente a favor de la constructora hasta el 31 de octubre de 2018 es de 119.438 euros (IVA no incluido).

La entrada de los sevillanos a este recinto desde su apertura es gratuita, como acordó el consejo de gobierno de la Gerencia de Urbanismo del 29 de abril de 2011 para “recompensar” de algún modo a los vecinos de la capital andaluza por las “molestias” de las obras.