La Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla ha remarcado la necesidad de que la Universidad de Sevilla (US) presente un proyecto de demolición y solicite la licencia urbanística preceptiva para proceder al derribo de la parte de la biblioteca del Prado de San Sebastián que se ha construido hasta ahora, en cumplimiento del auto del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) que así lo ordena.

Así lo han indicado fuentes municipales, que han manifestado que estos pasos deben seguirse como en el caso de cualquier otro particular, después de que el TSJA haya reclamado a la Hispalense que en el plazo de un mes informe tanto sobre el calendario de las sucesivas actuaciones con las que se pretende acometer la ejecución de sentencia como sobre la identificación de la autoridad o funcionario responsable de la misma.

La Universidad ya señaló, tras conocer la resolución judicial, que acatará el auto de forma "inmediata" y que actuará de común acuerdo con el Ayuntamiento, puesto que para eliminar tanto las estructuras subterráneas como las superficiales de la zona y volver a restaurarla como espacio verde necesitan contar previamente con el visto bueno del Consistorio de la ciudad, que es el que tiene autoridad en materia urbanística, a su Plan de Demolición. 

Aunque el auto posibilitaba esta opción, la US no va a recurrir porque, tal y como ya indicó el rector, Antonio Ramírez de Arellano, la Hispalense solo quiere "pasar página" al respecto de este proyecto. No en vano, ya tuvo lugar el acto de colocación de la primera piedra en el solar de la Avenida de Eritaña donde finalmente se erigirá la biblioteca central de la Universidad de Sevilla.