Ahora sí tiene sentido, nunca lo tuvo antes. Ahora sí porque ya no hay decreto en vigor que lo impida, el índice de contagios es ínfimo, las vacunas funcionan y la ciudad recupera, por fin, su calendario de actividades con las cautelas debidas pero con determinación. La Virgen de los Reyes saldrá en procesión extraordinaria antes de finales de 2021, probablemente en la última semana de noviembre o el día de la Inmaculada como fecha más tardía. El Cabildo Catedral trabaja ya en una iniciativa que está decidida y confirmada. Ahora sí, una vez reabierto el culto público, se prepara un gran acto que suponga la celebración de la diócesis de Sevilla en acción de gracias por el retorno a la normalidad.

La historia de la ciudad está jalonada de salidas extraordinarias por diferentes motivos de los grandes iconos devocionales, como es el caso de la Patrona de Sevilla. La Virgen de los reyes salió por última vez con carácter extraordinaria en mayor de 2014 con motivo del Año de la Fe. Desde entonces, sus salidas se han limitado a la procesión anual del 15 de agosto, siendo la última celebrada la de 2019. Ha salido también con carácter extraordinaria en rogativa por la lluvia o con ocasión de la clausura del congreso eucarístico de 1993, cuando dio la tradicional vuelta a la Catedral pocas horas antes de la llegada a la ciudad de Juan Pablo II.

La procesión de la Virgen de los Reyes tiene un tiempo y un espacio tan definidos en la mañana del 15 de agosto que la última extraordinaria resultó muy deslucida por la ausencia de fieles. Por eso ahora se cuidará especialmente la fecha en la que se celebrará. Una gran clave es que sea un día en el que pueden acudir los vecinos de los pueblos, que son la gran masa de devotos de la Patrona. También será fundamental el buen transcurso de los traslados del Gran Poder a Tres Barrios. Un buen resultado de la experiencia única que vivirá la ciudad con el Señor de Sevilla será muy importante de cara a esta procesión extraordinaria de la Patrona.