La confirmación esta semana por parte de la Comisión Europea a la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla de la apertura de un expediente contra el proyecto de construcción de un tramo de 2,5 kilómetros de la SE-35, una carretera considerada clave para asegurar la construcción del segundo establecimiento de Ikea en los terrenos de San Nicolás Oeste, ha provocado que Urbanismo se encuentre negociando una alternativa para conectar directamente la parcela donde se ubicaría el nuevo centro de la multinacional sueca con la A-4 mediante un acceso simple. 

La apertura del expediente viene precedida de la queja presentada por la Asociación Movida pro Parque Tamarguillo, que exige un trazado alternativo de esta carretera para evitar que pase sobre esa zona verde de 96 hectáreas que se abrió en 2010 tras una inversión de 30 millones de euros, parte de ellos procedentes de la Unión Europea. El colectivo no ve muy lógico construir una vía que divide el parque en dos justo encima de un humedal de especial interés para aves europeas y africanas. El documento pone en duda asimismo la calificación ambiental de todas las infraestructuras previstas en el PGOU aprobado en 2006 con el beneplácito de la Junta de Andalucía. 

Ante este contratiempo, el concejal delegado de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla, Maximiliano Vílchez, anunció este jueves que se tomará la decisión final sobre si ejecutar la alternativa propuesta o continuar con el proyecto de la SE-35 en tres meses, tras recibir "hace unos días" un comunicado con la apertura de la sanción por el planteamiento de la denuncia. "Que Europa abra un expediente no quiere decir que tenga razón", advirtió tras añadir que hay varias inversiones preparadas para San Nicolás Oeste y afirmar que existe un problema urgente de accesos. El documento por la queja vecinal y ecologistas aún está en una fase previa de consultas, por lo que aún es pronto para saber cómo terminará. 

La alternativa de construir un acceso a dicha zona desde la A-4, la antigua Nacional IV a la altura del aeropuerto, es más barata que la construcción de ese tramo de la SE-35 y, según los técnicos de Urbanismo, la redacción del proyecto sería tan sencilla que las obras podrían empezar a final de año, cumpliéndose lo previsto. 

Pero no todo es tan fácil, ya que el Ministerio de Fomento debería dar el visto bueno, después de que los propietarios de San Nicolás Oeste lo dieron esta misma semana tras una reunión con varios técnicos de la Gerencia "en la que no pusieron objeción tras explicarle la situación". El sí de la multinacional sueca parece mucho más improbable, ya que lo quiere evitar a toda costa es que se repitan los problemas de movilidad que se producen casi a diario en su tienda en Castilleja de la Cuesta. Un acceso desde la A-4 podría ser un embudo más. 

Vílchez detalló que se está ya trabajando con Demarcación de Carreteras. El resultado de esta labor se llevará a Fomento, quien tendrá la última palabra sobre si se desarrolla mediante una rotonda o un pequeño puente, entre otros. "No tiene por qué retrasarse la solución, porque sería un tema más económico y más rápido de ejecutar que la SE-35", indicó, dejando claro que, si hubiera que optar entre la SE-35 y la conexión mediante la A-4, se realizaría la de la SE-35. 

Respecto al expediente, advirtió que es "sólo" una apertura inicial y ahora el Ayuntamiento hará alegaciones, pero sobre todo las habrá de hacer la Junta, que es quien hizo la calificación ambientas del PGOU: "No es un problema de la SE-35, sino que cuestiona cualquier infraestructura relacionada con el plan. Vamos a pelear y hay que ir de la mano con la Junta, sin que se pongan zancadillas a nadie". Sería la primera vez que el Ayuntamiento y el Gobierno andaluz fueran de la mano en una cuestión referida al PGOU. 

El concejal de Urbanismo quiso dejar claro que si finalmente se desarrolla la alternativa, para la que se está trabajando sin descanso para que no se produzcan retrasos en el desarrollo de la zona y se ponga en riesgo la inversión, eso no va a suponer que no se ejecute la SE-35, ya que "es una vía muy necesaria recogida en el PGOU". 

Otra opción de Urbanismo, que es más lenta y cara, es la modificación del trazado de la SE-35 para que bordee el parque del Tamarguillo. Esto requeriría hasta un cambio en el PGOU y la preceptiva autorización de la Junta. Un largo camino que si se hubiera elegido desde un primer momento hubiera evitado los actuales quebraderos de cabeza del alcalde. Es lo que querían los vecinos y los ecologistas, pero el Ayuntamiento no lo consideró. 

Ante este panorama, cabe recordar que el propio alcalde aseguró el pasado año que la SE-35 no afectará al parque del Tamarguillo, ya que en el tramo de tres kilómetros desde San Nicolás Oeste hasta la avenida Emilio Lemos se ejecutaría un viaducto en el área del parque del Tamarguillo con el objetivo de "preservar" esta zona. Una solución que no evita el problema. 

El proyecto de la SE-35 se presentó en sociedad a finales de 2007. La intención era que los movimientos de tierra comenzasen en 2008 y que en el plazo de tres años, en 2011, la autovía estuviera en funcionamiento. Esta carretera está diseñada como una ronda intermedia entre la SE-30 y la futura SE-40, y uno de los objetivos más importante es que absorba más del 50% del tráfico que tiene actualmente el puente del V Centenario.