El panorama que dibujan los últimos datos de la pandemia en Sevilla no promete más que el anunciado endurecimiento de las medidas de movilidad y restricciones para contener el coronavirus. Como ya ocurrió en otoño pasado, los casos nuevos superan el millar diario -hoy son 1.216 más- y la presión hospitalaria está cerca de estallar de un momento a otro.

Sí logran frenarse, no obstante, las muertes y las últimas horas dejan dos nuevos fallecidos, cifra idéntica a la que se comunicó este jueves, lo que significa que el total de víctimas por esta enfermedad desde marzo del año pasado sube hasta las 1.207.

Sólo en los dos últimos días se han sumado más de 3.500 positivos nuevos en coronavirus en la provincia sevillana (1.354 el miércoles y 976 este jueves), lo que confirma que la situación no es coyuntural y que se ha asentado la fatídica tendencia al alza ya ha vivido en la segunda ola. En la primera la situación no es comparable porque la falta de test impedía confirmar tantos casos diariamente.

Lo peor de la situación es que las experiencias recientes han enseñado cómo funciona el virus y la pandemia, de modo que a los días de grandes cantidades de casos nuevos detectados le siguen después ingresos hospitalarios que amenazan con desbordar los centros y a sus profesionales. Esta presión ya se nota, porque Sevilla no llegó a rebajar del todo el efecto de la segunda ola en diciembre cuando ya comenzó a recibir los pacientes de esa tercera andanada del virus.

Ahora mismo hay 279 personas ingresadas, de las que 43 están en UCI. El dato supone un aumento general de 32 ingresos en apenas 24 horas y cinco traslados a las unidades de Cuidados Intensivos.

Los pacientes recuperados son en el nuevo registro de las últimas 24 horas 110. Este dato también confirma la elevación de la curva y del aumento casos activos con capacidad de contagiar que, a día de hoy, es superior a los 10.000 contagios (10.840 casos).

La tasa de contagio también sigue al alza y se sitúa en los 321,1 casos por cada 100.000 habitantes. La cifra sube 47 puntos en sólo 24 horas y lleva a la provincia al nivel extremo de contagio que marca el Ministerio de Sanidad para la incidencia acumulada.