"Gracias al bono de comercio hemos ganado nuevos clientes, nosotros no participamos en la primera convocatoria, pero en la segunda sí que ha coincidido además con las Navidades. Es cierto que se deberían hacer bonos con diferentes tipos de precios para ajustarlos a todo tipo de negocios", quien dice estas palabras es Mª Jesús Prieto, presidenta de los comerciantes del mercado de abastos de 'Las Palmeritas'.

Se trata de una propuesta que el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, está estudiando para la tercera edición de la iniciativa, con el objetivo de modificar los requisitos para ofrecer, además del bono de 50 euros, otros de cuantías más pequeñas y que así puedan sumarse más comercios que ofrezcan artículos de menor valor. Así lo ha explicado durante su visita a 'Las Palmeritas'.

Es el caso del frutero Alberto López, que regenta el puesto número 45 de este mercado de abastos y que, a pesar de ofrecer a sus clientes la posibilidad de pagar con el bono, considera que "nadie se gasta 50 euros de una sola vez en un establecimiento como este, aunque muchos clientes han venido a utilizarlo y nos sumaremos a la siguiente convocatoria".

En este mercado de abastos se han adherido 12 negocios al bono consumo, casi la mitad del mercado, aunque algunos placeros reconocen que no se han sumado y que sus clientes habituales tampoco le han preguntado por el mismo. Es el caso de Fernando Martínez, dueño de la carnicería de "Las Niñas", que señala su intención de formar parte de la tercera convocatoria, porque considera que la campaña supone un impulso para los comercios de proximidad.

La tercera edición tendrá un presupuesto de 800.000 euros 

Esta tercera edición, cuya puesta en marcha se prevé en primavera, contará con un presupuesto de más de 800.000 euros, superando en un 25% el de la primera convocatoria (600.000 euros) que arrancó en septiembre y contó con la adhesión de 417 comercios. "De la que podemos presentar un balance más positivo es de la segunda edición, que coincidió con las fiestas navideñas y aún teniendo un presupuesto de 420.000 euros, se sumaron casi 800 establecimientos de proximidad de toda la ciudad", ha recalcado Muñoz. 

"En total, por tanto, con esta iniciativa que hemos puesto en marcha durante 2022 hemos realizado una inversión municipal de un millón de euros y hemos generado un impacto en el pequeño comercio de 8 millones de euros. No hay campaña con más impacto y con tanta repercusión en el comercio de barrio", ha apostillado el alcalde. 

De hecho, Muñoz ha recalcado que, durante la segunda edición, se vendieron los 20.966 bonos que se pusieron a la venta y el resultado ha sido un impacto económico sobre el comercio de barrio de 3,5 millones de euros en toda la ciudad. "Esto quiere decir que hemos multiplicado por 3 el impacto previsto durante la campaña", ha señalado. En este sentido, ha explicado que la ciudadanía, una vez en los negocios de proximidad, han aprovechado para realizar más compras en estos comercios de barrio, con un impacto que ha llegado a todos los sectores: librerías, videojuegos, artesanía, productos de alimentación, o incluso la hostelería.