La Policía Nacional detuvo la semana pasada otra vez a Salah Eddine Taiebi, el presunto colaborador de Zouhair El Bouhdidi, el supuesto yihadista que preparaba un atentado en Sevilla y que fue arrestado en Marruecos el 9 de abril. Taiebi se encontraba en libertad con cargos, y con medidas cautelares, después de que fuera detenido tras la confesión de El Bouhdidi en Marruecos, el pasado 25 de abril en su domicilio de Sevilla Este.

La decisión del titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, de dejar libre a Taiebi chocó con el criterio de la Fiscalía, que había pedido su ingreso en prisión y después recurrió la puesta en libertad. La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha atendido el recurso del Ministerio Público y ha ordenado de nuevo la detención y el ingreso en prisión del joven Taiebi, según confirmaron a este periódico fuentes judiciales.

El joven, de origen marroquí y vecino de la calle Thailandia, en Sevilla Este, fue arrestado la semana pasada y ya se encuentra en la cárcel. Según una información publicada por El Confidencial, Taiebi habría sido seguido por los servicios de Información de la Policía desde su puesta en libertad. En este periodo, habría hecho fotografías de objetivos militares y habría tenido contacto con el Estado Islámico.

Precisamente Sevilla es la sede del Día de las Fuerzas Armadas de 2019, con actividades que comienzan este jueves y que tendrán su acto central durante la mañana del sábado 1 de junio, con el desfile aéreo y terrestre presidido por el Rey Felipe VI.

La operación antiterrorista surgió en Marruecos el 9 de abril, unos días antes de la Semana Santa, cuando fue detenido Zouhair El Bouhdidi. Este joven, de 23 años, es hijo de Abderrahim Bouhdidi, imán de la mezquita de Su Eminencia. La Policía lo vigilaba por compartir vídeos relacionados con el Estado Islámico. Antes de la Semana Santa hizo un viaje a Marruecos, lo que desató las alarmas de los servicios de Información españoles.

Bouhdidi fue detenido en Casablanca y confesó a la Policía marroquí que había contactado por Telegram con el Estado Islámico. También dijo que quería atentar en Sevilla, pero que un líder de la organización terrorista le pidió que esperara y que formara una célula. En ese interrogatorio dio varios nombres, uno de ellos el de Salah Eddine Taiebi, de 22 años, compañero de clase en la Universidad de Sevilla. Ambos estudian Filología Árabe. 

En los registros de las viviendas de los dos sospechosos no se hallaron explosivos ni material para fabricarlos, por lo que los servicios antiterroristas creen que no estaban preparando un atentado de manera inminente y que sus planes estaban todavía en una fase embrionaria.