La brecha entre el Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (Sppme) y el jefe de la Policía Local de Sevilla, José Medina Arteaga, se acentúa. Portavoces sindicales han denunciado este viernes el uso de escolta policial el pasado 3 de septiembre para acompañar al vehículo del marido y el futuro esposo de la ahijada de la ex-presidenta del Senado, y actual ministra de Justicia, Pilar Llop, en el día de su boda.

Según la denuncia del sindicato, habría sido el propio Medina Arteaga el que habría "autorizado, permitido y elegido" a una pareja de motoristas, haciendo de escoltas de desde Triana hasta la Catedral de Sevilla, donde tuvo lugar el enlace, transitando, incluso, "por zonas peatonales". Tanto fuentes del Ministerio de Justicia como del Ayuntamiento de Sevilla rehusaron hacer declaraciones sobre este asunto.

La crítica del Sppme va "más allá de lo profesional", indican las mismas fuentes a través de un comunicado, que señalan, no obstante, "la diferencia de clases" para el jefe de la Policía Local. "Los continuos atropellos a los derechos de los compañeros y los actos arbitrarios y autoritarios que a diario realiza, y que nadie les pone pie en pared" -indican- se han visto "superados" hace algunos días cuando, aseguran, "esta misma persona denegó" un acto homenaje al agente de la unidad de motoristas Valentín Corrales, recientemente fallecido, en el que sus compañeros querían darle un último traslado a hombros, debidamente uniformados para mostrarle sus respetos.

"Estaba todo organizado, eran escasos 100 metros, pero lamentablemente, tristemente, o de manera canalla, nuestro Jefe lo denegó, argumentando que es totalmente ilegal", lamenta el sindicato a través de un comunicado.

"Hay cosas que nos duelen, y Valentín ha sido una de ellas, que sin embargo tuvo su homenaje como se merecía, a pesar de la diferencia de trato, pero que no se ha merecido ni una referencia en la Orden del Cuerpo que dirige el señor Medina Arteaga", concluye el escrito.