Dos ex futbolistas de Jerez de la Frontera (Cádiz) y Dos Hermanas (Sevilla) figuran entre los cinco detenidos en la denominada operación Triada, en la que la Policía Nacional ha desarticulado un grupo criminal que extorsionaba a hombres con los que contactaban a través de páginas webs homosexuales y una vez concretado el encuentro sexual con las víctimas, acaban extorsionándolas y robándolas.

Los detenidos son dos hermanos, uno de los cuales había sido jugador de fútbol en Jerez de la Frontera, y un amigo de ellos que también había sido jugador profesional de fútbol en Dos Hermanas, según han confirmado fuentes del caso, que han explicado que incluso uno de los arrestado habría salido en algún conocido programa de televisión de búsqueda de parejas.

Entre los detenidos se encuentra además la compañera sentimental de uno de los hermanos, quien reconoció que sabía que debido a "problemas económicos" su compañero estaba dedicándose a realizar servicios sexuales, llegando en alguna ocasión a realizarse los pagos a su propia cuenta mediante el servicio de Bizum.

Una de las víctimas identificó a uno de los hermanos detenidos como la persona que le amenazó y dijo: "trae una pistola para matar a este hijo de puta", mientras otro de los miembros de la banda le decía "no llames a la Policía porque sabemos dónde vives".

El grupo de Atracos de la Policía Nacional en Sevilla concluye en el atestado remitido al juzgado que los investigados formaban un "grupo criminal, actuando de manera organizada, toda vez que existen varios envíos de cantidades de dinero entre los implicados".

Los agentes han comprobado asimismo que existen otros envíos de dinero a través de Bizum de cantidades significativas realizadas por otras personas que, sin embargo, han preferido no denunciar los hechos.

La Policía ha esclarecido hasta seis casos de extorsión a homosexuales por este grupo y atribuye a los detenidos cinco delitos: grupo criminal, amenazas, robo con violencia, lesiones y allanamiento de morada.

El modus operandi consistía en contactar con estas personas para un encuentro sexual y, posteriormente, amenazaban e intimidaban a los clientes, llegando incluso a agredirlos en alguna ocasión. El objetivo principal era obligar a las víctimas a hacer entregas de dinero o sustraerle objetos personales.

Dice le atestado que se trata de un grupo criminal dedicado a cometer robos con violencia o intimidación, normalmente en domicilios u hoteles, recurriendo para ello a la intimidación e incluso a la violencia si fuera necesario para conseguir sus fines. El beneficio económico lo obtenían, según los investigadores, bien del dinero efectivo entregado por las víctimas o a través de los envíos mediante Bizum o la venta de joyas u otros objetos valiosos que les robaban, han confirmado a este periódico fuentes del caso.

La Policía investiga igualmente el robo de una maleta de mano con unos 8.000 dólares a un ciudadano argentino, quien manifestó a una empleada del hotel donde se alojaba que lo habían amenazado "con matarlo si contaba algo o llamaba a la Policía". A otras víctimas también las intimidaron con frases como "Le voy a prender fuego a tu casa" o "como no me pagues te mato".

La manera de llegar a las víctimas es mediante las páginas web de contactos homosexuales, por lo muchas víctimas no proceden a denunciar los hechos, y aunque hay más perjudicados, no han querido denunciar cuando se han puesto en contacto con ellos los agentes.